Los pensamientos también se pueden traducir a frases y figuras invisibles que pasean por nuestro espíritu interior. Esto es lo que siento al leer la ultima reedición, corregida y aumentada de manera acertada, se actualiza lo escrito con añadidos muy interesantes, en el libro que ha presentado José Bacedoni Bravo.

Pepe Bacedoni, para mí es un creador, un diseñador de arte que lo mismo sueña con el trazado firme y lineal de una escultura que con sus numerosos dibujos en versiones clásicas, modernas, cubistas, hasta llegar a la traducción de sus sentimientos en la prosa filosófica. Pepe, ha heredado la sensibilidad de sus maestros en la vida artística. Apellidos que han pasado a la historia reciente de una Huelva que Bacedoni ha vivido en todo el esplendor de su carácter callado, silencioso, pensativo. La publicación que tan generosamente me envía no solo es muestra de su amistad, comprobada en años, sino de una sutil creación donde cada día veo crecer un espíritu lleno de una filosofía, hecha palabras que brotan de su corazón.

Dice el autor de "Pensamientos" que el arte transmite emociones, comunicación y felicidad y miramos a nuestro alrededor todo es arte, artesanía o diseño. La vida a veces es una locura inventada de cosas que más tarde caen en manos experimentada que desarrollan mentes sabias. Bacedoni, siempre unido en el fuerte lazo de los afectos, de su mujer, Mari Carmen, ha sabido conjugar a la perfección el sentimiento del arte con la inspiración creativa de su compañera.

Siempre recordaré aquel establecimiento que montaron en el pasaje de la calle Vázquez López, lleno de obras salidas la mayoría de su pensamiento y de sus manos que todos admirábamos con deleite. Aquel local era también punto de cita de tertulia de amigos donde conversamos de lo divino y humano siempre dentro de las reglas del arte, de la historia, de los sentimientos hechos dibujos de fino o fuerte trazo, pero siempre rectos, sin fallos, con la presencia de esa seguridad que da la valía de un profesional consagrado a sus sueños. Sus máximas de trabajo, fueron las mismas que las de su vida: "si quieres conseguir algo interesante échale paciencia y constancia". Y en esa línea Pepe Bacedoni sigue en su trabajo constante, silencioso, como su forma de ser, pero lleno de amistad y lealtad.

El, se ha dejado llevar por las manos de Dios y nunca perdió el rumbo de su vida llena de amor al arte. Y como él dice, "el Amor es la clave de la vida".

Su labor creativa continúa, prueba de ello que muchas veces las nuevas ediciones de lo ya escrito se ven complementadas con nuevos trabajos, con una extensa proliferación de pensamientos, como ha vuelto a suceder ahora, con la publicación que releo y guardo como un tesoro más de este amigo que cuando era niño ingresó en el colegio del Padre Laraña, porque quería ser carpintero y al pasar por una sala de Dibujo Técnico se hizo delineante, pensador, artista y creador, dejando para todos una huella permanente, como una luz que siempre brillará en el espírit de quienes le apreciamos