Chapado a la antigua

29 de septiembre 2016 - 01:00

'EL GRUÑÓN'

Multicines La Dehesa Islantilla y Cines Aqualon Puerto Huelva.- Producción: Finlandia, 2014.- T.O.: 'Mielensapahoittaja'.- Duración: 90 minutos.- Dirección: Dome Karukoski.- Guión: Dome Karukoski, Tuomas Kyro y Pekko Peseonen.- Fotografía: Pini Hellstedt. Música: Hilmar Orn Hilmarson.- Montaje: Harri Ylonen.- Intérpretes: Antti Litja, Kari Ketonen, Janne Reinkamen, Timo Lavikainen, Petra Frey, Mikko Neuvonen, Mari Perankoski, Viktor Drevitski, Alina Tomnikov, Man Petankoski, Jika Forss, Mimma Puolakanaho

Ver una película finlandesa en nuestras salas es realmente insólito, impensable. Pero entre los estrenos del verano -también éste que llega en este otoño recién estrenado - todo pueden ser sorpresas. También ésta que no deja de ser una muy apreciable producción muy por encima de lo que pueda esperarse por su título. Podríamos decir que su protagonista, sobre el que lógicamente gira toda la historia, es como se suele decir en la expresión castellana muy habitual, un tipo "chapado a la antigua", totalmente convencido de que cualquier tiempo pasado fue mejor y encastillado irreductiblemente en su ambiente y sus costumbres. Un tosco anciano al que parece habérsele parado el reloj en 1953, para el que todo lo que ha sucedido después le resulta deleznable y odioso.

Es un viejo huraño y cascarrabias que vive en su casa de campo en la Finlandia profunda y rural, dedicado a sus tareas diarias que sólo interrumpe para ver a su mujer enferma de alzhéimer ingresada en un hospital. Ni siquiera renueva su ropa o sus electrodomésticos, al igual que hace con sus ideas. Un día se cae por las escaleras del sótano de su hogar y se fractura un tobillo. El percance le obligará a desplazarse a la casa de su hijo en Helsinki para consultar con un terapeuta. Se encontrará con una nuera a la que no soporta. Ella con una formación superior no está dispuesta a perder ni un minuto de tiempo discutiendo con su suegro, absolutamente opuesto a las normas y costumbres del nuevo hogar. El hijo, que no parece congeniar con su padre, tampoco facilita la relación. Su actitud, irreductible y tozuda, complicará la vida familiar y al mismo tiempo dará lugar a situaciones realmente increíbles. Todo se complicará más cuando se implica en un trato con unos empresarios rusos para ayudar a su nuera y lograr el afecto de su hijo.

Entre la comedia costumbrista y la tragicomedia grotesca en muchos de sus pasajes, El gruñón, que fue la película más taquillera en Finlandia en 2014, dirigida por Dome Karukoski, realizador finlandés nacido en Chipre, ha abordado un tema -tan peculiar en tantas familias- que tanto se presta a lo caricaturesco y divertido pero también a lo sentimental, tratándolo de manera ocurrente, con corrección y cuidando diestramente la expresión visual. Ello no le impide imprimir a su relato de humor, negro en ocasiones, ácido también y con muchas escenas en que provoca la risa de los espectadores, de manera que abunda en situaciones realmente hilarantes a las que el director les saca el mejor partido. Su narrativa se remansa convenientemente sin que ello erosione ninguna de esas secuencias más jugosas y los golpes de efecto más desenfadados.

Hay una parte más melodramática resuelta a modo de flash backs donde el director plasma los motivos que expresan la actitud del arisco protagonista, y que constituyen por otra parte los pasajes menos afortunados de la realización. Pero en general la película prodiga esos momentos más gratificantes para el espectador, punzantes, sarcásticos, brindando un tipo de humor que puede divertir a todos los públicos. Son frecuentes las ocasiones de reír y eso es ya bastante satisfactorio.

QUIROGA

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