Vía Augusta
Alberto Grimaldi
La vía es (por ahora) andaluza
VALVERDE, con un pie sobre la Sierra, éste es el título de una magnífica habanera compuesta por Diego Romero Álvarez hace ya algunos años. Y, sin duda, el municipio andevaleño tiene muchas de las características de la serranía como hemos podido comprobar en las V Jornadas de Patrimonio del Andévalo. Destaca esta puerta del Andévalo por la afición por las músicas caribeñas perfectamente aquilatada por el marocho Tomás López en su ponencia sobre el género de la habanera. También fue un momento estelar y mágico cuando, el sábado, la Real Agrupación Artística de Valverde del Camino nos deleitó con un maravilloso concierto de este género.
El patrimonio valverdeño es muy amplio como consecuencia del paso de muchas civilizaciones y la mezcolanza es seña de identidad en un lugar donde siempre se han cruzado los caminos. La llegada de las compañías mineras extranjeras, en la segunda mitad del siglo XIX, han dejado una arquitectura industrial que hoy alberga elementos docentes como el conservatorio de música o culturales como el museo etnográfico de la Casa de Dirección. La numerosa población que se concentró en torno a nuestra faja pirítica necesitó de establecimientos para dar rienda suelta a la alegría o quizá ahogar las penas, surgiendo las fábricas de aguardiente, como la de Zarza Mora, donde una valiente familia intenta conservar contra viento y marea una tradición que no se debe perder.
Pero Valverde también es urbanismo, así nos lo puso de manifiesto el arquitecto Claudio Rodríguez Centeno. Con todo lujo de detalles expuso la historia del Pinar del Saltillo o del Estado, con sus orígenes madereros ligados a la Armada española, pero también desgranó la presión urbanística que ha sufrido por parte de los vecinos. El movimiento que en un principio fue desordenado hoy se ha racionalizado como consecuencia del moderno planeamiento. Actualmente los llamados Pinos son una seña de identidad muy marcada en la carretera nacional que nos lleva a Huelva.
Las infraestructuras culturales valverdeñas son notables, el teatro es un magnífico edificio gestionado por gentes muy competentes que ha servido de marco a las ponencias y exposiciones. Allí se encontraba la muestra documental expuesta por el Archivo Municipal, donde se daban cita un conjunto de significativos documentos entre los que podemos mencionar el proyecto del ferrocarril de Zafra a Huelva de James Bull o los pleitos por los baldíos de Niebla. Tampoco le iban a la zaga las maquetas o miniaturas sobre patrimonio arquitectónico valverdeño de José Ramón Blanco Ramírez.
La alegría llegó a las Jornadas con ellos, nos referimos a los alumnos de los diferentes colegios e institutos que recibieron una magistral charla de un gran docente, Sebastián Bermejo. Más de trescientos se dieron cita en una experiencia que va a servir de modelo para futuras ediciones.
Tampoco podía faltar la alusión al patrimonio arqueológico, representada en los dólmenes de Los Gabrieles. La Asociación Campo de Andévalo abogó por una mayor protección a través de su declaración como Bien de Interés Cultural. El profesor de la Universidad de Huelva Juan Aurelio Pérez Macías nos fijó al terreno con su ponencia sobre el camino romano de Valverde. El cerreño José María González Parrilla discurrió por el panteón de los dioses prerromano con hipótesis sobre el dios celta Endovelicus.
Los medios de comunicación valverdeños como Radio Valverde Información o Televalverde confeccionaron para la ocasión varios vídeos que reflejaban no sólo el amplio patrimonio andevaleño sino también las imágenes más significativas de las jornadas.
La mesa sobre el patrimonio documental fue uno de las actividades más esperadas, pues se trataba de darle visibilidad a los archivos municipales, eclesiásticos y señoriales, como el Ducal de Medina Sidonia. A través de los directores del Archivo Diocesano (Manuel Jesús Carrasco Terriza), de Diputación Provincial y de la Fundación Ducal de Medina Sidonia (Lilliam Dhalman) pudimos conocer tanto el estado como los fondos de estos viejos graneros.
Muy emotiva fue la entrega tanto de los premios del Paseo Fotográfico a Alfonso Feu, Antonio Rodríguez y Pedro Chaparro como del Andevaleño 2014 al cantaor Rogelio Beltrán El Puebla, que nos regaló sus cantes a pesar de su avanzada edad. A éste último se le hizo entrega por parte de la Asociación Campo de Andévalo de un retrato de la pintora valverdeña Isabel María Castilla.
Constituye todo un acontecimiento en estas jornadas, de las que ya se han realizado 5 ediciones, la muestra de dulces andevaleños. En las mesas del teatro pudimos ver los coscaranes, rosas de miel, cagajones de puño, engañamaridos, orejas, alfajores o piñonates. Al mismo tiempo en el patio hacían buñuelos de viento dos magníficas reposteras Rocío Pérez Gallego y Eugenia Gallego Castilla.
Durante esta edición las comunicaciones se han multiplicado, tratando algunas temas de la localidad valverdeña u otras cercanas, como La plaza de toros de José Antonio Romero, La Guerra Civil de Juan Carlos Sánchez, La tradición oral de Fernando Gómez, De Facanías a Valverde del Camino de José Jesús Geraldo, La historia de la fábrica de explosivos de La Torerera de Félix Carnero, Historia de Villanueva de las Cruces de José María Cortés y El indiano cerreño Lucas Domínguez de Pepe Rico. También en otras ocasiones el ámbito fue más amplio y se extendió a todo el Andévalo, como el Contrabando durante la Guerra Civil de Pedro Feria, La toponimia de Ana Victoria Castillo, el Campo de Andévalo de Andrés Bruno Romero o el Cielo andevaleño de la Asociación de Astronomía de Valverde del Camino.
Los Jornadas han contado con un magnífico cartel anunciador que reproduce un cuadro de la ermita de San Sebastián del pintor local Manuel Parreño. Además la Diputación Provincial de Huelva editará un libro de actas con todas las ponencias y comunicaciones.
Desde esta tribuna nos queda felicitar a los organizadores, la Asociación Campo de Andévalo y Ayuntamiento de Valverde, pero también a las asociaciones de defensa del patrimonio valverdeñas, encabezas por Juan Carlos Castilla. Para finalizar resaltar la gastronomía local con platos como el arroz con carne o las garbanzás que hemos podido degustar durante los almuerzos. Habida cuenta del éxito ya nos preparamos para el año que viene donde las Jornadas andevaleñas viajarán a otro municipio con un extenso patrimonio cultural y medioambiental: San Bartolomé de la Torre.
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