Desde la ría
José María Segovia
Hoy es Navidad
He pasado unos años buenos escribiendo esta columna local. Pero me voy con una sensación de hastío, porque miro a la Huelva de hace casi un lustro y hoy ¿es mejor?
Hace un año hubo una manifestación contra la presencia sempiterna de los fosfoyesos que algunos sindicatos quieren promover como abono para macetas y que en otros países desarrollados se apartan de la población humana; un año más tarde, a pesar del cambio de gobierno en el Ayuntamiento y la entrada de la oposición socialista (¡vaya palabra!), sabemos que Huelva va a ser un referente de la España más honda y profunda expresada en esa analogía populista del catolicismo llamada Semana Santa pero Magna; que para el Recre se pondrá lo que "haiga farta" porque ser de Huelva y del Recre es lo mismo; que aquí, en pudiendo pagar, se come de puta madre y va a venir gente con posibles para que nos contraten por horas y limpiar su mierda en hoteles a cambio de salarios de subsistencia, concepto de amplia tradición liberal hace siglo y medio, y todo financiado por la propaganda pública del bote común andaluz; que vamos a dar la campanada en Año Nuevo como Calañas, que es un segundo Madrid... y ahí están viendo pasar el tiempo: los fosfoyesos. ¡Cómo estaríamos con la derecha!
Pero uno mira las afueras del consistorio y se encuentra otra vez con esa reivindicación del genocidio... Huelva Puerta de América llamé a esta tierra en un artículo, porque no tenemos que ser colombinos, remover aquella conquista es insultar a los conquistados, aunque a ellos les importe ya un carajo, no sepan ni dónde estamos y nosotros no seamos responsables de la esclavitud de entonces; pero hay que jugar las cartas para ser reclamo y no otro tópico que nos haga dudar de la formación básica de nuestros políticos: arte, literatura, universidad, investigación, congresos transoceánicos, becas e intercambios, expansión de la UHU por América y fusión con la Hispanoamericana de La Rábida y sus programas; pues no, palmadita en la espalda al indio, esperando que nos dé las gracias por la sífilis.
Queremos aeropuerto, AVE y estación espacial, y nos falta infraestructura cultural, museística y lo más gracioso: nada más incómodo y tercermundista que moverse (¡ja, ja!, moverse) por la provincia con nuestros transportes públicos... ¿No habrá gente pensando en las obras y su millonada y comprando terrenos para especular con estas cosas? ¿Hay alguien por ahí pensando con un par de ideas estructuradas? Lamento ser duro, pero me avergüenzo.
Y Fuentepiña, Juan Ramón, Fuentepiña...
Muchas gracias al periódico, a su actual director, a sus trabajadores, siempre diligentes, sacrificados y efectivos, y amables, y a esos lectores que me han soportado y que, a veces, me han parado por la calle y me han dado el mejor pago (y único) recibido: la gratitud por un texto, una idea o un comentario, gracias. Al anterior director, Javier Chaparro, me lo quedo como amigo.
Eso sí, el nuevo Paseo Marítimo del Odiel es bonito.
También te puede interesar
Desde la ría
José María Segovia
Hoy es Navidad
Confabulario
Manuel Gregorio González
Lotería y nacimientos
El zurriago
Paco Muñoz
Me dais asco casi todos
Paisaje urbano
Eduardo Osborne
La senda de Extremadura
Lo último