Cultura

Las dudas se ciernen sobre el Festival

  • A dos meses del comienzo del certamen, la Junta condiciona su aportación al pago por parte del Ayuntamiento · Afirma que la deuda municipal hace "inviable" el evento.

El mayor evento cultural de la capital, el Festival de Cine Iberoamericano que lleva 37 años acercando el arte del otro lado del Atlántico, podría sucumbir a la crisis económica y una de sus consecuencias: la total ausencia de liquidez en las administraciones. La Junta de Andalucía, uno de los cuatro patronos del Festival (el resto son el Ayuntamiento de Huelva, la Diputación y el Ministerio de Cultura), fue la encargada de destapar ayer la caja de los truenos, poniendo los focos sobre la deuda municipal y advirtiendo que la aportación del resto de las administraciones estará condicionada al pago por parte del Consistorio onubense.

La tormenta se iniciaba vía comunicado de prensa. El delegado territorial de Educación, Cultura y Deporte, Vicente Zarza afirmaba que la deuda del Ayuntamiento con la muestra cinematográfica "hace casi inviable el desarrollo de la próxima edición", que se celebrará del 19 al 24 de noviembre. El Consistorio onubense adeuda más de 300.000 euros de ediciones anteriores y si no paga esa cantidad, proseguía Zarza, "estaría poniendo en peligro la celebración de la 38 edición del Festival". La Diputación se sumaba a la crítica: la diputada de Cultura, Elena Tobar, coincidió en que el certamen se verá afectado si el Consistorio no abona su deuda. ¿Y el criticado? El concejal de Cultura del Ayuntamiento de Huelva, Manuel Remesal, contestaba de inmediato que la Junta "no está capacitada ni legitimada para hablar de deuda", puesto que debe al Ayuntamiento más de 10 millones de euros en concepto de Impuesto de Bienes Inmuebles y de Tracción Mecánica que no paga desde 1994.

Pero con el presupuesto de esta edición aún por determinar, el dedo en la llaga de la deuda municipal trae otra preocupación para el Festival: aunque la Junta asegura que "sigue manteniendo el compromiso que siempre ha tenido" y que aportará lo que le corresponde, también advertía ayer en su comunicado que si el Ayuntamiento incumplía de nuevo en sus pagos "condicionará la aportación de este año del resto de las administraciones".

Con el Consistorio sometido a un duro plan de ajuste, el pronto pago de esa deuda se ve difícil; desde dentro sólo se asevera que se trabaja en solventar el abono lo antes posible. Pero tampoco es buena la situación económica del resto de los patronos: la Junta de Andalucía no descarta acudir al Fondo de Liquidez Autonómica, el Gobierno central ya plantea el rescate (suave o no) europeo y la Diputación tiene numerosos frentes que atender. En ese contexto, el Consistorio ya ha avisado que este año bajará su aportación (de 120.000 a 94.000 euros este año) y es de esperar una reducción también en el resto. La advertencia de la Administración autonómica suma más dudas sobre la viabilidad económica de un certamen que ya tenía dificultades para esta edición, para la que además ha perdido a su patrocinador principal (que no ha podido sustituir).

¿Está el Festival en peligro? El director del evento, Eduardo Trías, confió en que "se consiga una financiación mínima y que en modo alguno se plantee no realizar esta edición". "Evidentemente hay un estrechamiento, el problema es que se convierta en estrangulamiento", detalla el director, destacando que para que esto no ocurra es necesario que los patronos del Festival concreten tanto la aportación económica como el calendario de pagos. Para fijar esas cantidades tendrá que celebrarse una reunión del Patronato, que después del cruce de declaraciones de ayer se prevé más que tensa.

Precisamente a esa necesidad de convocar la reunión se referían ayer los patronos, en un nuevo capítulo de polémica política de los que el Festival ha tenido varios a lo largo de su historia, pero que parecía haber quedado apartada desde que en la precampaña de las elecciones municipales la Diputación sacase a relucir también la deuda municipal. El Consistorio acusó a la Junta de "ensuciar el buen nombre y el indudable prestigio de nuestro Festival de Cine" y de usarlo "por intereses meramente políticos y partidistas como arma arrojadiza contra el Ayuntamiento", insistiendo además en que el Patronato de la Fundación es el foro para dirimir posibles divergencias. Pero su convocatoria se retrasa, alegó Elena Tobar, quien aseveró en declaraciones a Europa Press que "se ha suspendido en varias ocasiones", por lo que le reclamó al alcalde de Huelva y presidente del Patronato, Pedro Rodríguez, su convocatoria. Finalmente se celebrará el jueves; ese día se decidirá el futuro del Festival de este año.

Y mientras tanto, el certamen sigue rodando: se presentó el cartel, las películas van llegando (el día 15 se cierra la recepción), la selección de los jurados está en marcha y el Foro de Coproducción tiene 160 proyectos. El espectáculo continúa, por ahora.

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