Nos vemos en la portada: arrancan Las Colombinas con un estallido de emoción

El encendido del alumbrado de Las Colombinas es uno de los momentos más esperados del verano. Cada año, este instante marca el verdadero inicio emocional de las fiestas para miles de onubenses y visitantes, que acuden con la ilusión en vilo incluso antes de que caiga el sol. Todavía era de día cuando la entrada al Real se llenaba poco a poco de gente que se aseguraba de conseguir un buen sitio y tener suficiente batería en el teléfono para inmortalizar el pistoletazo de salida de las fiestas onubenses que ya es más que un acto simbólico que este año comenzaba acompañado de un fandango.

La alcaldesa de Huelva, Pilar Miranda, junto al presidente de la Diputación Provincial, David Toscano, y en presencia del concejal de Cultura y Patrimonio Arqueológico, Nacho Molina, el resto de corporación municipal y la alcaldesa infantil, han sido los encargados de apretar el botón para volver a iluminar la portada del recinto un año más. Las más de 80.000 luces led de la portada, que este año homenajea al emblemático edificio El Comercial, actual sede de la Fundación Cajasol, cegaron a los presentes que quedaron maravillados por el espectáculo lumínico que será el lugar más fotografiado sin duda de estos días.

El estallido de luces provocó un mar de móviles alzados, ojos brillantes y un estruendo de aplausos tan solo ensordecidos por el acompañamiento musical de la Banda Municipal de Música de Huelva, bajo la magistral batuta de Francisco Andrés de la Poza, que tocó la Obertura de Carmen de Bizet y Festive Overture de Shostakovich cuyos golpes sonaban al unísono del espectáculo pirotécnico que inundó el cielo de luces atrayendo todas las miradas. Tras el último cohete unos cañones lanzaron serpentinas que los niños fueron corriendo a cogerlas para usarlas a modo de bufanda mientras la banda comenzaba a tocar Mi Huelva tiene una ría y el público unía su voz cantándola haciendo latente el sentimiento de unidad que alimenta Las Colombinas.

Así han empezado oficialmente los días de celebración, tras un Día del Niño que dejaba latente las ganas de los onubenses de la semana grande del verano en la capital que atrae no solo a vecinos, si no a visitantes del resto y fuera de la provincia.

Este año, como ha recalcado la alcaldesa, es el año de la "unidad" que reivindican “una Huelva que avanza de manera conjunta, que cree en la colaboración entre administraciones, en la fuerza de lo público y lo privado, y en una ciudadanía que participa y empuja”. Esta unidad, como ha señalado Miranda, está consiguiendo "poner a Huelva en el lugar que se merece". La alcaldesa recalcó que estas fiestas conmemoran "todo lo bueno de la provincia" y ha querido ensalzar la labor que realiza la Diputación y los cambios que están forjándose en la capital para impulsarla como la unión del Muelle de la Riotinto, la rehabilitación del Cuartel de Santa Fe, el nuevo Mercado de San Sebastián o la recién inaugurada Plaza de las Colonias, donde antes se ubicaba la antigua Fábrica de Harina.

Miranda también ha puesto el foco en la vocación americanista “de una ciudad en crecimiento cohesionada, abierta y ambiciosa” que fue la cuna de una de "las mayores gestas de la humanidad hace 533 años" y que cada verano se conmemora durante estos días en los que la ilusión y el cariño por Huelva florece entre los vecinos con mayor intensidad. También quiso adelantar, aunque "no comprometer del todo" la idea de reubicar la portada de las Fiestas Colombinas en otro lugar del recinto, concretamente para enfrentarla con la Ría "tal y como siempre debió estar".

El encendido de la portada da oficialmente la bienvenida a días de disfrute, vasos de ponche que no paran de salir, conciertos, momentos familiares y reencuentros con amigos que durante estos días el mensaje que más recibirán será el de "nos vemos en la portada".

Unas Colombinas para conocer “lo mejor de la provincia y conectar con nuestras raíces”

Este año las Fiestas Colombinas han estado dedicadas a la Diputación de Huelva por su labor en la preservación de los Lugares Colombinos y por su el respaldo constante de nuestros vínculos con Iberoamérica.

El presidente de la institución supramunicipal, David Toscano, ha agradecido este homenaje entregando a la alcaldesa una acuarela firmada por Víctor Pulido que muestra uno de los arcos mudéjares del edificio de la Estación Huelva-Término que se está rehabilitando, como muestra de "unión de nuestro pasado y nuestro presente". Por su parte, la alcaldesa entregó al presidente de la institución provincial la emblemática Nao Santa María, emblema de Huelva y de las Fiestas Colombinas.

Toscano ha destacado que esta festividad “celebra nuestro pasado compartido y nuestra proyección iberoamericana; una fiesta que une historia y presente, cultura y convivencia, emoción y orgullo”. Subrayando las palabras de la alcaldesa de la capital, el presidente de la Diputación ha recalcado que "tenemos que avanzar haciendo una Huelva mejor sin olvidar nuestro pasado".

Toscano ha viajado durante el alumbrado por sus recuerdos hasta traer de nuevo “el primer día en el que, con la ilusión de un niño descubrimos las Colombinas; un momento único, irrepetible y mágico”. Un momento que se ha vuelto a repetir este año para aquellas personas que han conocido por primera vez las Fiestas Colombinas y que, como les pasa a quienes caen en sus encantos, regresarán a su portada el año que viene.

Como reflejo de este homenaje a la Diputación de Huelva la Caseta de Exposiciones acoge este año una muestra especial organizada por la propia Diputación. La Caseta ofrece una ventana a las bondades de la provincia y un punto de encuentro con las raíces y el talento onubense. Las exposiciones se presenta así como una oportunidad para redescubrir la provincia con una mirada renovada y orgullosa.

La primera de las exposiciones, titulada Finibus Onubae ofrece murales de gran tamaño que invitan a reflexionar sobre los caminos que han llevado a formar el carácter de Huelva a través de ilustrar el patrimonio social y cultural de la provincia. La segunda muestra, Un júbilo compartido, cuenta impactantes fotografías de Javier Andrada, en las que capta a través de su cámara la esencia de las celebraciones onubenses más significativas.