Una treintena de alumnos inician el curso en la Escuela de Islantilla

La actividad formativa se retoma adscrita al SAE con dos itinerarios en los que se impartirán 1.300 horas lectivas

El Gobierno andaluz invierte 180.000 euros en mejoras

Alumnos de la Escuela de Hostelería de Islantilla aguardan el paso de la comitiva de autoridades en el acto de inauguración oficial del curso celebrado ayer. / Reportaje Gráfico: J. Landero
Jordi Landero

Islantilla, 13 de septiembre 2018 - 01:38

La Escuela de Hostelería de Islantilla dio ayer, definitiva y oficialmente, el pistoletazo de salida a un nuevo curso académico. Retoma su actividad habitual volviendo a encender los fogones donde, hasta su cierre, se había formado una veintena de promociones de alumnos, algunos de ellos grandes restauradores en la actualidad, como es el caso del onubense Xanti Elías, estrella Michelin. Acaban así cuatro años de cierre y de incertidumbre, protagonista entre el personal docente y de administración, así como entre los habitantes y empresarios de la zona.

El centro formativo fue reinaugurado oficialmente por el consejero de Empleo de la Junta de Andalucía, Javier Carnero, quien estuvo acompañado por los alcaldes de los dos municipios que integran la Mancomunidad de Islantilla, Lepe e Isla Cristina, Juan Manuel González y Montserrat Márquez, respectivamente.

Este centro, único en la provincia de su especialidad y uno de los cinco que hay en Andalucía, ha recibido del Gobierno andaluz una inyección de 180.000 euros, con la que, entre otras tareas, se han eliminado barreras de accesibilidad, creándose al mismo tiempo nuevas dependencias y rehabilitándose otras en mal estado.

Para el presente curso se han puesto en marcha dos itinerarios formativos: Bar-Cafetería y Restaurante, por un lado, y Cocina, por otro. Concluirán el 12 de agosto del próximo año tras haber impartido unas 1.300 horas lectivas cada uno. Los alumnos que completen alguno de los itinerarios recibirán al final de curso un certificado de profesionalidad que avala los conocimientos adquiridos.

En total son una treintena de alumnos los que se han incorporado esta semana a ambas líneas. Tras explicar brevemente las acciones desarrolladas en torno a la rehabilitación del centro y la oferta formativa programada para este curso, Javier Carnero señaló que está "más que demostrada la apuesta del Gobierno andaluz por la Formación Profesional para el Empleo", y más concretamente, "por la formación de calidad en hostelería, para tratar así de cubrir una demanda cada vez más pujante en toda Andalucía, donde la Costa de la Luz ofrece -y seguirá ofreciendo cada vez más- una buena cantidad de oportunidades".

El consejero expresó su convencimiento de que esta reapertura "nos permite decir que hemos recuperado, y también relanzado, tanto el prestigio de los antiguos consorcios-escuela -hoy escuelas de formación- como garantía de éxito". Resaltó, de la misma forma, "el nivel de inserción laboral tan alto que presentan estos centros, de ahí que en nuestra agenda política su reapertura constituya un hito fundamental".

Carnero defendió el modelo propuesto por la Junta de Andalucía de "integrar estas escuelas de formación en el Servicio Andaluz de Empleo (SAE)", así como incidió en que después del "letargo" en el que ha estado la Escuela de Hostelería de Islantilla durante los cuatro últimos años, "ahora hay que mirar lo positivo: 30 alumnos han iniciado su formación en una escuela de excelencia que busca reforzar un sector cada vez más pujante en la provincia de Huelva, como es el turístico". En ese sentido consideró la formación "fundamental" para ofrecer mejores servicios y para que el turismo "siga generando riqueza en esta comarca y en toda la provincia".

Para el titular de Empleo de la Junta, esta Escuela tiene vocación local, provincial, regional, nacional y hasta internacional, con una formación de excelencia, ya que "los profesionales que de aquí salen pueden trabajar en cualquier gran restaurante del mundo".

A preguntas de los periodistas, Carnero precisó que las "dificultades" que a lo largo de los últimos cuatro años ha superado el centro "han sido muchas", destacando que "la Ley de Racionalidad nos obligó en principio a extinguir los antiguos consorcios de formación, incluido éste; de ahí su integración en el SAE". Ello requirió una serie de trámites administrativos que "desagraciadamente son lentos en la Administración porque requieren de mucha seguridad jurídica", explicó. "Además, para otorgar los certificados de profesionalidad a los alumnos, según las exigencias del Gobierno de España, el centro también requería de una serie de mejoras y obras".

Para la presidenta de la Mancomunidad de Islantilla, y alcaldesa de Isla Cristina, Montserrat Márquez, están de "enhorabuena" porque "es muy importante contar con esta Escuela de Hostelería, en la que se formaron profesionales de gran nivel durante veinte años", y porque "es una apuesta y una seña de identidad para el destino Islantilla".

Para el regidor lepero fue un día "feliz" para todos porque este centro "ha sido señero", a la vez que "reflejo de la evolución que ha tenido la hostelería en la zona, donde hay un antes y un después en relación a su apertura". Para Juan Manuel González "ha habido un periodo de letargo en el que esta Escuela no ha sido productiva, pero ahora tenemos que centrarnos en el presente y en el futuro porque tenemos que seguir formando en ella profesionales de primera".

Una mirada al futuro entre el profesorado

Para los trabajadores del centro, que han sido quienes más han padecido en primera persona los cuatro años de cierre, a partir de ahora "solo hay que mirar hacia adelante". Para Blas Moreno, profesor de repostería y panadería, "hoy es un día muy emocionante y especial porque volvemos a la realidad después de unos años oscuros, y porque volvemos a encender fogones y hornos, así como a tener alumnos, que es el principal sentido de este centro". "No vamos a mirar al pasado -prosiguió- sino hacia adelante, para formar a estos alumnos con el objeto de que cuando pidan trabajo en hoteles y restaurantes sean competitivos y no se sientan nunca inferiores a otros. Vamos a hacer de ellos buenos profesionales, porque ellos vienen con muchísimas ganas e interés, como así lo reflejan sus caras". "Mirar al pasado tan amargo que hemos vivido en los últimos años es muy triste", reconoce, pero si lo hacen "es solo para que esto no vuelva a ocurrir". Porque, añade, "estos alumnos tienen que salir de aquí para comerse el mundo, porque un buen cocinero tiene trabajo aquí y en cualquier lugar".

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