Una enorme cadena humana contra el cáncer de mama recorre Huelva: "Queremos que la detección precoz sea una prioridad en el sistema de salud"

Una enorme cadena humana contra el cáncer de mama recorría este viernes las calles de Huelva "por la prevención". Una iniciativa organizada por la Asociación Onubense de Cáncer de Mama (AOCAM) que ha contado con la colaboración del Ayuntamiento de la ciudad así con numerosas empresas onubenses.

La comitiva se reunía a las 16:30 en el Corte Inglés Costa Luz para realizar una entrega simbólica de camisetas a cambio de un donativo de 5 euros. Cada una de ellas incluían un número para participar posteriormente en un sorteo. Y a las 17:30, la marea rosa partía rumbo a la Plaza del Ayuntamiento, recorriendo las calles para concienciar sobre la importancia de prevenir la enfermedad en el marco del Día Mundial contra el Cáncer de Mama, que se celebra el próximo 19 de octubre.

En esta ocasión, el encargado de alzar la voz para leer el manifiesto era el onubense Raúl Rodríguez Cabello, Hermano Mayor de la Hermandad de la Victoria y padrino de la cita. "Las mujeres con cáncer de mama rompemos techos de cristal defendiendo una realidad donde desaparezca cualquier discriminación en los derechos y los deberes y aspirando a la igualdad en todas las esferas de la vida", comenzaba el manifiesto.

Como integrantes de la Federación Española de Cáncer de Mama (FECMA), recordaban que "trabajamos para que la investigación, la innovación y la detección precoz, sean una prioridad en nuestra Sistema Nacional de Salud".

Igualmente, en el manifiesto mostraron su rechazo a que exista "cualquier limitación, exclusión o discriminación en las prácticas de detección precoz, en los diagnósticos, en los tratamientos, en la atención personalizada, y menos aún si esa discriminación se debe al hecho de la residencia territorial".

En cuanto a la reciente polémica con los cribados, defendieron "una gestión pública de los Programas de Detección Precoz que debieran ser homogéneos en todas las comunidades cutónomas en lo relativo a las edades de las mujeres que son convocadas, en los métodos de lectura e interpretación de las mamografías y en la evaluación de la calidad de esos programas, tendrían, asimismo, que adecuarse a las recomendaciones de la Unión Europea".