La Ejecutiva provincial del PP aprobó ayer por unanimidad iniciar el procedimiento disciplinario contra los concejales militantes de Almonte que votaron a la candidata de Mesa de Convergencia para su investidura como alcaldesa de la localidad, y que, por lo tanto, no acataron las directrices del partido, que eran votar a la propia candidata del PP a la Alcaldía.

Este expediente sancionador, que es el mecanismo que se abre ante el comportamiento negligente de cualquier afiliado, que puede terminar con la expulsión, o bien puede finalizar con otras medidas sancionadoras contempladas en los estatutos del partido, será elevado al comité de derechos y garantías provincial, que si considera que los ediles deben ser expedientados, elevará su propuesta de resolución al comité de derechos y garantías regional y más tarde al nacional, como ya anunció hace unos días el viceportavoz del partido, Alberto Fernández, durante una rueda de prensa.

Respecto a Punta Umbría, también se aprobó ayer por unanimidad la creación de una gestora presidida por Rocío Serrano y que completan Laureano González, Estefanía Aria, Carmen Céspedes y Alberto Fernández.No en vano, en la junta directiva provincial también se abordó la reestructuración de los partidos en ambos municipios, ya que el PP aspira a seguir teniendo implantación en la sociedad de Almonte y Punta Umbría.

Así, en lo referente a la localidad costera, el PP seguirá ejerciendo la labor de oposición a pesar de no contar con grupo municipal, mientras que en Almonte el PP espera que, una vez que se abran los expedientes, los concejales entreguen sus actas, con lo que el PP podría contar con tres representantes en el Consistorio.