La artista de Huelva Rocío Márquez se sincera sobre su nuevo disco 'Himno vertical': "Estaba atravesando el duelo de mi prima y ha sido como un homenaje"

Rocío Márquez, artista onubense de referencia en el mundo del flamenco a nivel mundial, acaba de publicar Himno Vertical, su noveno disco. Un álbum en el que sigue experimentando con nuevas maneras de entender el flamenco a través de su lado más creativo.

Durante su última entrevista en Huelva Información, la cantaora se sinceró a cerca del proceso creativo, explicando que su nuevo trabajo está inspirado en la pérdida de su prima. Un duro golpe para la artista que quiso reflejar en las letras y en la música de esta nueva aventura discográfica que ya cautiva a miles de oyentes dentro y fuera de nuestras fronteras.

"Me apetecía mucho usar el cante para sentirme más cerca de Nuri. Justo yo estaba atravesando su duelo y precisamente este disco está "atravesado" por el eje de la ausencia, de la pérdida. Además, Pedro Rojas Ogáyar, guitarrista que hace y firma conmigo este proyecto, también estaba en el duelo de su padre. Entonces, sin tener una idea conceptual ya desarrollada pensamos en plasmar lo que supone atravesar el duelo. Surgió como improvisando. Teníamos muchas ganas de hacer algo juntos. A mí me interesa su visión de la música, porque él tiene la visión del mundo clásico, pero también incorpora códigos de la música contemporánea, de la vanguardia, de lo experimental. Y a mí todo eso en lo vocal me llama mucho y era como una manera también de continuar mi exploración", aseguraba.

Durante el propio proceso, confiesa, "tuvimos una sensación muy extraña de llegar a cosas que ni siquiera sabíamos que teníamos. Por ejemplo, a nivel vocal, descubrí todo lo que es rozar más la voz, sonidos nuevos... empecé a usar distintas técnicas que no había usado antes y que de repente surgieron y a Pedro le pasaba lo mismo. Entonces ahí empezó también a rondarnos esa idea sobre el arte de que realmente la obra no nos pertenece. Que más bien somos el canal para transmitirla, pero que no es nuestra. Y ahí hay algo muy hermoso porque te conecta con ese otro punto trascendental. En mitad del proceso nos dimos cuenta, sin haberlo planeado, de que estaba siendo como una conexión más allá de nosotros mismos de lo que hasta el momento habíamos podido sentir".

Una manera, afirma, de "homenajear con este disco a nuestros seres queridos que ya no están y acercarnos a ellos". De hecho, más allá de los dictados, que sirven para sostener la estructura, el eje que vertebra el disco, explica, "la primera pieza es un fandango y es el fandango que he cantado a mi prima siempre. Y me apetecía mucho que abriera un poco con la letra que yo le escuchaba a Nuri. Entonces, es como que por un lado roza lo trascendental y por otro lado es algo como muy palpable. Muy traído a tierra".

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