No es casualidad que Hospital de Día Médico y Servicio de Rehabilitación del Hospital Infanta Elena convivan en un mismo espacio. Lo hacen desde hace cerca de dos años -el servicio estaba en un edificio anexo-, un cambio que vino dado con el objetivo de mejorar la seguridad a la hora de realizar las técnicas de rehabilitación, "ya que se llevan a cabo en un dispositivo hospitalario capaz de atender cualquier complicación, permitiendo así la realización de actuaciones y procedimientos de mayor complejidad y riesgo", explica a este diario la especialista en Rehabilitación, María Oliva González. 

"Estar en un edificio anexo suponía que, ante cualquier complicación, teníamos que llamar al 061, con la consiguiente espera para el paciente y el evidente riesgo que para él supone", explica. Ahora, "tenemos a nuestro lado todo un arsenal médico y de enfermería". Y no solo ello. Aquellos pacientes que, tras recibir una técnica, experimentan dolor "pueden ser dejados en observación en el Hospital de Día Médico hasta que se encuentren mejor", apunta González. 

Los procedimientos que se llevan a cabo en el Hospital de Día se utilizan para la atención, tanto de miembros superiores (hombro/codo-antebrazo / muñeca-mano) como inferiores (cadera-muslo / rodilla-pierna / tobillo-pie), siendo destacable la gran variedad y aplicabilidad de estas técnicas, las cuáles son cada vez de mayor complejidad, lo que permiten disminuir el número de sesiones de fisioterapia, así como evitar intervenciones quirúrgicas. 

El hospital Infanta Elena ha puesto el foco en la incorporación de, en palabras de la especialista, "técnicas guiadas por ecografía que requieren un abordaje mínimamente invasivo en el paciente con patologías del aparato locomotor, muscular, articular o degenerativa, entre otras". Todo ello con el objetivo de reducir el dolor, "que es lo que te impide hacer cualquier actividad".

El complemento de la visión ecográfica mejora la efectividad del tratamiento y aumenta el perfil de seguridad para el paciente. La introducción de la ecografía en la especialidad de Rehabilitación y Medicina Física ha permitido también incorporar el concepto de alta resolución en las consultas, permitiendo una confirmación diagnóstica más rápida y la aplicación de una terapia específica para cada caso y más eficaz.

Todas estas técnicas se hacían antes en los quirófanos, "con lo que conlleva reservar un quirófano y hacer que el paciente pase por todo este proceso", apunta la profesional. Ya esto no resulta necesario y, gracias a las infiltraciones guiadas "podemos dirigirnos al sitio donde está el daño concreto y liberar ese área mediante un líquido para volver a favorecer el movimiento". 

Cada día la especialista atiende a una quincena de pacientes programados, los cuales cuentan además "con el respaldo y el apoyo de nuestro equipo médico y enfermero por si hubiera alguna complicación".