Historia del Palacio del Cine

CON el comienzo de la televisión en los años finales de los 50, la gran pantalla comenzó a tener un despiadado enemigo. Décadas después, el cine tenía que enfrentarse al vídeo. Así, una familia alquilaba una película, disponía de aire acondicionado en casa y de un frigorífico repleto de bebidas y viandas… disponiendo de todo esto, ¡para qué iba a desplazarse al cine y gastar un dinero que hacía falta en casa!

Todo lo contrario le ocurría al dueño o gerente del cine: tenía que poner en condiciones higiénicas y de exorno una amplia sala, necesitaba un equipo de proyección con la última tecnología de la época, a lo que había que sumar el gasto de los empleados, de un operador de cine, y todo para una parca entrada de cinéfilos en cada sesión.

Y el séptimo arte no estaba exento de los riesgos que implicaban el feroz urbanismo. Pero, dejemos los malos recuerdos y acerquémonos a los tiempos risueños en los que las salas cinematográficas eran prósperos negocios, conozcamos sus orígenes y brevemente la historia de la sala de proyecciones llamada Palacio del Cine.

Los planos del Palacio estaban firmados por el gran arquitecto Juan Miguel Rodríguez Cordero y las empresas que llevaron adelante su construcción pertenecían a la élite de sus respectivas especialidades. Así, de levantar el edificio se encargó ECOSA (Empresa Constructora Onubense, SA); la instalación de la calefacción -según el diario Odiel- fue realizada por Casa José Triano, de Sevilla, que ya había realizado en nuestra ciudad las instalaciones de la calefacción, saneamiento y preparación del agua caliente del Hotel Victoria, la calefacción del Círculo Mercantil y Agrícola, jefatura de Obras Públicas y Oficinas de González Barba. Todo lo concerniente al ramo de electricidad fue supervisado por Electricidad Industrial F. López Romero. La pantalla del Palacio fue fabricada por la empresa barcelonesa Manufacturas José Jover, SA. Martínez Fuentes, empresa hispalense, realizó la decoración en escayola, las butacas fueron construidas y tapizadas por la fábrica de butacas para salas de espectáculos que regentaba en Madrid José Torres. En la decoración del Palacio del Cine colaboró Rafael López Atance, que tenía sus talleres electromecánicos de Mármoles y Cantería en la Avenida de Alemania, número 90. Por último, la pintura fue llevada a cabo por Enrique Romero. En definitiva, la simbiosis de tantos excelentes profesionales hizo que la empresa propietaria del local Ecorsa y la wempresa explotadora, Sánchez Ramade, ofreciesen al público de Huelva un salón de espectáculos con los últimos adelantos.

La inauguración del Palacio del Cine se efectuó el jueves, 10 de diciembre de 1959, y tuvo una finalidad altruista: los ingresos obtenidos se destinaron a la humanitaria obra de la Campaña de Navidad que desembocaría en la construcción de viviendas. A las 22.45, las señoras con traje de tarde y los caballeros con taje oscuro, para darle mayor solemnidad al acto, presenciaron la gran superproducción cinematográfica titulada El rey y yo, interpretada por Yul Briner, Deborá Kerr, Rita Moreno… El salón amplio, de perfectas líneas, severamente exornado presentaba un lleno absoluto. Los ingresos obtenidos por esta primera exhibición alcanzaron las 14.500 pesetas. Para esta misma campaña se proyectaron en este local las películas Noche de paz, Litri y su sombra…

En los primeros años, éxitos de esta pantalla fueron los estrenos titulados; Carmen la de Ronda por Sara Montiel y Jorge Mistral, el jueves, 24 de diciembre de 1959; Un rayo de luz, por Marisol, el miércoles, 8 de febrero de 1961…

El sábado, 3 de septiembre de 1967, la Empresa Sánchez Ramade estrenó el film titulado Las salvajes en Puente San Gil. A la gala cinematográfica asistió mucho público, el director de la película, Antonio Ribas, y de los actores, María Silva y Trini Alonso. Ese mismo día, Cayetano Ortega Romero, gerente del Palacio del Cine, anunciaba la próxima visita del genial actor Robert Mitchum.

El sábado 5 de abril de 1975, gritos, carreras… ¿Qué ocurría? La respuesta fue dada al día siguiente por el diario Odiel: "Un morrocotudo susto, de los que hacen época, se llevaron los espectadores que en la noche de ayer asistían a la proyección de la película Ayer, hoy y mañana, en el Palacio del Cine, la sala comenzó a vibrar como sacudida por un fuerte temblor de tierra y un grupo de personas corrió atropelladamente hacia la salida temiendo una catástrofe. El resto se puso inmediatamente en pie, a la espera de los acontecimientos. Uno de los que más corrieron y hasta se cayó, don Diego Ortiz, más conocido como El Niño del Tercio, se dolía horas después de un brazo. La gerencia de la sala ordenó el corte de la película y el encendido de las luces, reanudándose la sesión cuando se comprobó que no había peligro alguno de movimiento sísmico. Posteriormente pudimos conocer que todo fue debido al paso de un camión de transporte pesado por la Avenida de Alemania, sobre los impresionantes baches que precisamente a la altura del cine, por su parte próxima, tiene la calzada. Huelva insólita, que diríamos".

Recordemos algunos de los éxitos cinematográficos que se constituyeron en auténticos reclamos publicitarios de la calidad del propio Palacio del Cine: El viernes, 5 de diciembre de 1975, la Empresa Sánchez Ramade obtenía un éxito más al proyectar El Padrino. 2ª Parte, interpretada por Al Pacino.

Jueves, 18-12-1975, Barbarella, con Jane Fonda.

El 3-12-1976, estrenó con todos los honores, la excelente película titulada La Espuela.

El martes, 25-10-1977, ya convertido el Palacio en un cine de Sala Especial, estrenó una película que volvió a poner de moda las colas en este cinema: This is América (La locura americana). Para poder verla se anularon, incluso, los pases de favor o gratuitos.

El sábado, 19 de agosto de 1979, los niños huelvanos se acercaron en bandada para ver como Spiderman, el hombre araña trepaba por los rascacielos, y con hilo de araña que segregaba, era capaz de realizar mil y una proezas contra el imperio del crimen.

El viernes, 15 de febrero de 1980, Huelva fue protagonista, merced a la gran Empresa Sánchez Ramade, de la proyección privada de la película Ratataplán, cinta estrenada en nuestra ciudad días antes que se hiciera en cualquier otra ciudad. Al estreno de este film, asistieron los medios de comunicación así como diversos invitados pertenecientes al mundo del cine.

El 16 de mayo de 1982 se proyectó en el Palacio del Cine la película Todos al suelo, interpretada por Andrés Pajares, Fernando Esteso, Antonio Ozores, Azucena Hernández, Beatriz Escudero, Juanito Navarro, Alfonso del Real, Rafaela Aparicio, Valeriano Andrés y la escultural Mabel Escaño.

La última proyección del Palacio del Cine se efectuó el jueves 17 de octubre de 1985. El largometraje se titulaba Maestros en fuga y había sido protagonizada por Francis Ford Coppola.

Aquel día el Emperador tenía como cartelera En la corte del Faraón y Las eróticas vacaciones de Estela, el Rábida, El rey David…

En 1988, el Palacio se utilizó para que nuestra ciudad presentara su evento musical carnavalero. Después, años de silencio…

Los amantes del cine que circulamos diariamente por delante de lo que fuera el Palacio del Cine, no nos sentimos totalmente desilusionados, ya que si bien no observamos cartelera alguna en su fachada, al haberse mantenido casi intacto el edificio, con una leve abstracción nos imaginamos que nos vamos a dirigir a la taquilla del antiguo cine, establecida en la parte izquierda de su fachada principal, para comprar la entrada que nos permita ver El indio azul, Papillón o algunos de los numerosos éxitos que vivimos en la pantalla de este irrepetible cinema.