La Fundación Ángel Muriel entregó ayer su III Premio de Investigación Médica que recayó en la oncóloga radioterápica Verónica de la Pinta, del Hospital Ramón y Cajal de Madrid. Su trabajo está dirigido al desarrollo de una técnica que tiene como objetivo que las radiaciones que se emiten hacia las células cancerígenas no afecten a las sanas, de manera que esa radiación sea más eficaz y se eviten efectos secundarios en el paciente. El trabajo de la especialista madrileña está enfocado a la zona abdominal, aunque comentó que se están usando en otras áreas, "de hecho estas técnicas se han aplicado al cerebro y al pulmón. Esa mayor eficacia causará asimismo,que el número de sesiones del tratamiento descienda de 28 a sólo 3, "lo que supone mayor comodidad para el paciente". El galardón le fue entregado por María del Mar Muriel.

La sede de la Fundación Ángel Muriel está en Huelva y tiene como objetivos apoyar a las personas diagnosticadas con cáncer y a sus familiares, así como desarrollar acciones que permitan avanzar contra el cáncer.