Fernando Vergel se convirtió ayer en el nuevo decano del Colegio de Abogados de Huelva al tomar el relevo en la organización tras la renuncia de Juan José Domínguez. El relevo se certificó en una reunión extraordinaria de la Junta de Gobierno del Colegio de Abogados en la que Domínguez firmó una carta en la que oficializa su paso atrás, lo que será comunicado oficialmente al Consejo General de la Abogacía y al Consejo Andaluz de Colegios de Abogados en los próximos días. Tras la reunión, Juan José Domínguez entregó de forma simbólica la toga con puñetas blancas que acredita a Fernando Vergel como su sucesor hasta la celebración de elecciones en el colegio que tendrán lugar durante el último trimestre del año.

Fernando Vergel reconoció que “para mi es un honor como no podía ser de otra manera el sustituir a Juan José Domínguez, pero nunca trataré de imitarlo porque Juan José Domínguez es imposible de imitar salvo que se quiera incurrir en el más espantoso de los ridículos”. Vergel aseguró que desempeñará su cargo “lo mejor que pueda y como mi maestro me ha enseñado a lo largo de tantos años y espero cumplir con las obligaciones del cargo”.

En el escrito mediante el cual Juan José Domínguez deja el puesto, explica “su renuncia al cargo de decano que he venido ostentando de forma ininterrumpida durante 29 años meses antes de finalizar mi actual mandato y ello por razones estrictamente personales que me impiden continuar al frente de esta muy querida institución con la dedicación y eficacia que la misma merece, sin que ningún otro motivo haya influido en la adopción de la mencionada decisión”.

Domínguez asegura que “el legítimo orgullo que siempre he experimentado por estar al servicio de este colectivo se ve en estos momentos compensado con el honor y el privilegio de haber ostentado el cargo más representativo de nuestro querido colegio”. Todo ello, continúa la misiva, no hubiera sido posible sin contar “con el apoyo, la ayuda, el compañerismo y el respaldo de todos los colegiados y la colaboración de todos los compañeros que a lo largo de todos estos años han participado en la difícil pero hermosa tarea de representar y dirigir los designios del colegio”.

Para el desde ayer exdecano, “sin el trabajo continuo y sacrificado de todos los miembros de la Junta de Gobierno (de todos sin excepción, los actuales y los que les precedieron) no podrían haberse conseguido los grandes logros alcanzados que pueden resumirse con la feliz consecución de la sede colegial elogiada de forma unánime tanto por su ubicación como por su distribución y servicios que se prestan en la misma”.Por ello, en el momento de su renuncia, Domínguez quiso “no solo expresar mi agradecimiento más sincero, sino también compartir con la junta de gobierno cuantas distinciones me han sido concedidas y otorgadas por lo que expreso mi deseo de que todas pasen a formar parte del patrimonio del colegio”.