Parece sacada de un sueño, pero está en Huelva: Así es la playa natural y aislada de todo que los expertos en viajes adoran

Verano en Huelva

Entre las maravillas costeras de Andalucía, hay una playa de Huelva que brilla con luz propia, y que ha sido elegida una de las playas más bonitas de España por expertos en viajes por el territorio nacional

Esta playa de Huelva sin multitudes podría ser la más pura del sur de Europa (y lo vas a querer comprobar)

La playa de Huelva que conquista no solo por su belleza, sino por tener el nombre más gracioso de España

Un paraíso de playa a la que se llega por un hermoso camino de madera
Un paraíso de playa a la que se llega por un hermoso camino de madera / M.G.

Entre las maravillas costeras de Andalucía, hay una playa de Huelva que brilla con luz propia, y que ha sido elegida una de las playas más bonitas de España por expertos en viajes por el territorio nacional.

Situada entre dos grandes destinos playeros, Matalascañas y Mazagón, este extenso arenal destaca por su ubicación privilegiada dentro del Parque Natural de Doñana, lo que garantiza un entorno sereno, sin ruidos urbanos ni masificación turística. Es, sin duda, un paraíso escondido ideal para quienes buscan desconectar en un lugar virgen y silencioso.

Hablamos de la espectacular playa de Cuesta Maneli, un rincón natural que ha sido reconocido por la revista Viajar como una de las más bellas de España, además de por otros medios como Condé Nast Traveler, que la incluye entre las mejores playas de nuestro país, y National Geographic, que la cataloga también como una de las más hermosas. Además, lidera el ranking de Google como la playa andaluza mejor valorada por los usuarios.

Una playa de ensueño alejada de edificaciones
Una playa de ensueño alejada de edificaciones / M.G.

A pesar de su creciente popularidad en guías especializadas y entre viajeros experimentados, Cuesta Maneli mantiene su esencia salvaje gracias a su acceso limitado y su protección ambiental. Su arena dorada, sus aguas limpias con tonos turquesa y verde, y la ausencia total de servicios artificiales (no hay chiringuitos, duchas ni hamacas) la convierten en un refugio de paz casi intacto.

Para llegar, hay que recorrer un sendero de madera de aproximadamente un kilómetro, que serpentea suavemente entre vegetación autóctona hasta desembocar en unas escaleras empinadas que conducen directamente a la playa. La experiencia ya comienza en el camino: un paseo escénico que conecta al visitante con la naturaleza más pura.

Cuesta Maneli
Cuesta Maneli / Josué Correa

El coche se deja en un aparcamiento habilitado junto al acceso (el coste suele rondar los dos euros), y desde ahí empieza la caminata. Es un esfuerzo leve, pero altamente recompensado por la sensación de aislamiento y belleza natural que ofrece este enclave único.

National Geographic la describe como "una extensa franja de arena fina, sin interrupciones ni construcciones, a las puertas del Parque de Doñana". Por su parte, la revista Viajar destaca tanto la pasarela de madera como el espectacular entorno geológico que rodea la playa: el imponente Monumento Natural del Acantilado del Asperillo, un sistema de dunas fósiles únicas en Europa, que se extienden por más de una docena de hectáreas y poseen una morfología de lo más singular.

Perfecta para los que huyen de las playas masificadas y anhelan sumergirse en un entorno 100% natural, Cuesta Maneli es mucho más que una playa: es una experiencia para los sentidos, un rincón protegido donde el mar y la tierra se encuentran en estado puro.

stats