El Sporting tumba a un buen Almería

SPORTING: Juan Pablo; Lora, Botía, Iván Hernández, Canella; Rivera, Nacho Cases (Eguren, 70'); De las Cuevas (Nacho Novo, 79'), André Castro, Diego Castro (Ayoze, 88'); y Barral. ALMERÍA: Diego Alves; Michel, Marcelo Silva, Carlos García, Luna; M'Bami, Bernardello, Fabián Vargas (Ulloa, 53'), Piatti (Uche, 61'); Crusat (Feghouli, 67') y Goitom. Gol: 1-0 (12') De las Cuevas. Árbitro: Turienzo Álvarez (vasco). Mostró tarjetas amarillas a Vargas, Botía, Silva, Juan Pablo, André Castro y Ulloa. Incidencias: Los dos equipos saltaron al terreno de juego con camisetas de ánimo al barcelonista Abidal. Unos 25.700 espectadores estuvieron presentes en El Molinón.

El Sporting prolongó su buena racha en el Molinón ante un rival directo como el Almería, que mereció más en un partido en el que los locales se mostraron muy seguros en defensa y se llevaron los tres puntos gracias al temprano gol de Miguel de las Cuevas.

Sporting y Almería se jugaban mucho en este partido y la delicada situación que atraviesan se notó en el juego durante toda la primera parte, en la que hubo poco fútbol brilló por su ausencia, pero no la incertidumbre, porque el dominio del balón estuvo muy repartido aunque las mejores ocasiones fueran para los locales.

La primera de ellas llegó cuando apenas se habían cumplido dos minutos de juego en una internada de Barral, en posición de extremo derecho, que culminó con un centro que remató de cabeza el portugués André Castro y el balón se estrelló en el poste de la meta defendida por Diego Alves, que se había quedado totalmente estático.

El Almería dominaba el centro del campo, pero el Sporting, cuando robaba un balón, iba directo hacia Alves; en uno de esos robos llegó a Barral, cuyo remate lo rechazó el portero del equipo almeriense dejando el balón a pies de Diego Castro, que también remató, pero golpeó en un defensa y llegó a De las Cuevas, quien sí acertó a marcar. El Almería reclamó mano de De las Cuevas, pero el árbitro bien situado dio validez al gol que ponía por delante a los rojiblancos y aumentaba el nerviosismo de los andaluces.

El Almería mejoró en el segundo tiempo y dispuso de ocasiones para firmar las tablas, pero sus méritos no fueron recompensados y los de Preciado vencieron.