El pasado fin de semana, con un calor impresionante, tuve el placer de asistir al enlace matrimonial "del niño y de la niña" de dos buenos amigos míos. Los contrayentes fueron Prudencio Serrano Robles y Miriam Candón Salgado, hijos de Prudencio Serrano, y Merche Robles por parte del novio y José Candón y Luisa Salgado de la novia respectivamente. La función religiosa se llevó a cabo en la parroquia de la Concepción, a media tarde, con unos termómetros que marcaban cerca de los cuarenta grados y todo el personal con traje de chaqueta, y resoplando, ¡qué calor, Dios mío!, pero había que aguantar el tipo. Las féminas, con los vestidos de tirantas, soportaban mejor las altas temperaturas. La celebración se llevó a cabo en Moguer, y la verdad es que como se hizo al aire libre, se estaba mucho mejor. Los novios guapísimos ellos, Myriam más que Pruden, estaban radiantes de felicidad y no pararon de charlar con todos sus amigos, mientras que los padrinos, José y Merche, también lucían sus mejores galas. La madrina, mejor que él. La verdad es que el ambiente fue extraordinario y todos los que asistimos a esta ceremonia no nos será fácil olvidarla. Los recién casados, al día siguiente, partieron de viajes de novios en un crucero por el Mediterráneo. Está claro, que le deseamos toda la felicidad del mundo.

En esta misma celebración pudimos saludar al consejero delegado del Recreativo de Huelva, Michael Dumois, que acompañado por su encantadora esposa, Pepa Ruiz, no quisieron perderse el enlace matrimonial del hijo de su amigo Prudencio, que en su día, fue también consejero del Decano. El cerebro gris del conjunto albiazul, estuvo charlando con Manolín Candón, abuelo de la novia, que estaba sudando más que nadie, por lo que el nudo de la corbata lo tenía por la barriga. El antiguo boxeador, que es un gran aficionado del club más antiguo de España, le decía a Michael, que el año que viene el equipo estará de nuevo en Primera División, además lo comentaba pero que muy convencido. Ellos también se lo pasaron en grande y es que la velada invitaba a ello, pues el ambiente era sensacional.

Cambiando de tercio, pero sin dejar la fiesta aparte, he de comentar, que Paco Román, responsable de la cerveza Mahou en Huelva, es todo un maestro a la hora de tocar la guitarra, pero no se le queda corto a la hora de arrancarse por sevillanas y fandangos, sin olvidarnos de sus chistes, Miguel Angel Núñez, comercial de Motor V Centenario, tal y como se pudo dejar de manifiesto en la casa de José Manuel Muñoz, de cocinas Capis, en el transcurso de una fiesta familiar, donde el único que no hizo nada, fue nuestro compañero Pepe Lapi, los demás todos dejaron algo de la esencia artística que llevan dentro. El caso es que se lo pasaron fenomenal y están dispuestos a repetir la experiencia lo antes posible.

Pero a la hora de hablar de arte, además de cinco estrellas, hay que acordarse de Manolo Pozo, que junto a Alfonso Illesca, José Antonio Ramírez y Martín Pérez Campillo, formaron allá por los años setenta y ochenta el grupo Los Gachós, creadores de los fandangos de La cacería. Pues bien el amigo Pozo y su hijo Manolo, han abierto hace unos días un nuevo establecimiento hostelero, concretamente una cervecería, en pleno centro de Huelva, en la calle Garci Fernández, donde a buen seguro van a llevar todo el arte y profesionalidad que poseen estas dos personas de tanto prestigio en nuestra capital. Enhorabuena y que el éxito os sonría.

Al empresario isleño, Juan Vázquez, gerente de Usisa, me lo encontré hace unos días en la capital, diciéndome que el sector de la conserva, está como todo en España, pero que él va tirando, y que agudizando el ingenio, va saliendo adelante, fruto que duda cabe, de la calidad que ofrece en sus productos. Por cierto, Juan me decía que en la actualidad tiene 300 trabajadores en su fábrica.