En menos de doce horas se inundaron calles y sótanos de pueblos de norte a sur del territorio onubense y el agua hizo casi intransitable la circulación de distintas vías de la red de carreteras de Huelva. El temporal de fuertes lluvias azotó por segundo día consecutivo a la provincia mientras los embalses comienzaron a aliviarse de agua para evitar males mayores.

A la hora de cierre de este diario, se hacía un primer balance de los efectos colaterales del aguacero que no ha dado tregua en la recta final del Puente de la Inmaculada. Mientras en Fuenteheridos se cerraba la jornada a oscuras por un corte en el suministro eléctrico que, según fuentes municipales, comenzó a 06:00 y quedó sin solución por parte de la compañía Endesa, el Consorcio Provincial Contra Incendios y Salvamento de Huelva daba cuenta de una veintena de intervenciones, relacionadas con inundaciones por lluvias y caídas de árboles, en la práctica totalidad de las comarcas.

La zona más afectada por las lluvias fue la Costa, donde los bomberos tuvieron que achicar agua en varias calles de Lepe, Islantilla, Punta del Moral, Pozo del Camino, Isla Cristina y Ayamonte. Por su parte, en Alosno tuvieron que rescatar a una persona que se había quedado atrapada en el interior de su vehículo debido a la crecida del agua, además de intervenir ante la inundación de varias calles tanto en esta localidad como en Tharsis.

En la Cuenca Minera, el temporal dejaba una imagen inédita: la inundación de la Corta Atalaya. El agua alcanzó a una tercera parte de la mina a cielo abierto y más de 100 metros (un total de 27 pisos) de sus 350 metros quedaron anegados tras el paso de las sucesivas tormentas.

En Valverde del Camino, en dos ocasiones quedó anegada la gasolinera, coincidiendo con los momentos de mayor registro de precipitaciones, a las 07:00 y las 14:00. Aquí, se contabilizaron en la tarde de 40 litros por metro cuadrado. Las fuertes lluvias dejaron imágenes impresionantes, como la riada de agua por el Polígono El Monete hacia la avenida de la Constitución, mientras que la ludoteca Gañafote se vio afectada por segunda y el agua anegó asimismo a cuatro viviendas y un almacén de Valverde, así como en otras tres viviendas situadas en Calañas y La Zarza.

En otro punto de la provincia, en Aracena, alrededor de unos diez metros de la pared de entrada al campo de fútbol de San Jerónimo caían a consecuencia de la lluvia, colisionando con algunos vehículos que se encontraban aparcados. Esta obra fue inaugurada hace pocos más de dos años.

En cuanto a los efectos del temporal en las carreteras, numerosas vías de la provincias registraron o inundaciones en varias localidades. La A-461, en el kilómetro 20,5 a su paso por Higuera de la Sierra, y la A-495 en san Bartolomé de la Torre sufrieron cortes durante la mañana. La intensa tromba de agua del mediodía, acompañada de fuerte aparato eléctrico, provocó que se formasen bolsas de agua en la A-5053, que conecta Cartaya con Punta Umbría, entre la zona conocida como La Galera y el Rompido.

Por otra parte, los garajes de algunas de las urbanizaciones situadas a ambos márgenes de ese mismo tramo de carretera también se vieron afectadas por la abundante agua caída, viéndose obligados sus propietarios, en el caso de los apartamentos Río Piedras, a sacar sus vehículos de los mismos para bombear el agua acumulada.

Según la información de incidencias de la Dirección General de Tráfico, las fuertes lluvias también mantenían cerrada al tráfico en Huelva, la HU-6110 en Escacena del Campo, en ambos sentidos, la A-461, a la altura de Higuera de la Sierra, mientras que en la A-490,en Villanueva de los Castillejos, la circulación se encontraba condicionada.