Los afanes

Javier Sánchez Menéndez

Obama y Sócrates

OBAMA no visitó Sevilla. El Air Force One pasó de largo desde Torrejón de Ardoz hasta Rota. Atrás quedaron días de organización y seguridad. Algunos inteligentes llegaron a decir que al menos había servido para que el alcalde de Sevilla acicalara una ciudad sucia. Las poco más de veinte horas que el presidente de los Estados Unidos estuvo en nuestro país dicen que dieron para mucho, lo cierto es que apenas dieron para nada. Una cosa sí hay que reconocer, en los encuentros con Rajoy, Obama le comentó que la desigualdad es el germen del populismo. Y argumentó: si la globalización no es equitativa y solo beneficia a las élites, vamos a ver un populismo que va a dividir a la sociedad y puede ir en aumento. Él lo ve en su país con el auge de Trump, y nosotros lo tenemos hasta en la sopa. Pero el populismo es el germen del populismo, es el propio populismo quien genera el populismo. Lo observamos en Venezuela. Y en España, unas orquestadas maniobras durante el 15-M, generaron un movimiento de indignados -que no fue espontáneo-, y ese populismo fue generando más populismo hasta acabar convertido en partido político. No debemos confundirnos, el populismo crea desigualdad, genera odio y sinrazón, favorece el extremismo. Frente a ello, el único elemento coherente es el diálogo, pero fíjense, el populismo evita el diálogo coherente para convertir la crítica en discurso. En otro orden de cosas a Pedro Sánchez le va a pasar lo mismo que a Sócrates. Ya Joaquín Leguina ha comenzado a decir que van a tener que cambiarlo. Ni le darán de beber cicuta, ni lo condenarán por corromper a los jóvenes, simplemente buscarán otro líder que esté más acorde a las ideas de los barones socialistas. Y me pregunto ¿alguien en este país da la talla?

Los seguidores de Sócrates recomendaron al filósofo huir antes de la condena. Los seguidores de Pedro Sánchez prefieren convertirlo en mártir político, un mártir que necesita el populismo. Tal vez el PSOE esté buscando generar populismo con su propio populismo. Obama se marchó de España sin visitar Sevilla. Los cuarenta grados a la sombra esperan al presidente de los Estados Unidos. Un líder que habló apenas tres minutos con los líderes de la oposición (Sánchez, Iglesias y Rivera) y estos no tardaron ni esos tres minutos en colgar en Twitter lo provechosa que había sigo su reunión con el presidente americano. Y es que las redes sociales, que en el fondo son populistas, generan populismo.

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