A remolque de las subvenciones estatales, la ciudad dará otro empaque a la Avenida Martín Alonso Pinzón, paisaje de edificios oficiales y bulevares, entrada histórica.

La remodelación de la Gran Vía, destinada a "dignificar" un proyecto incubado en los años 40 y 50, figuraba en el programa electoral de Pedro Rodríguez en su aterrizaje político en 1995. Ahora la financiación del Fondo de Inversión Local (creado por el gabinete de Zapatero como receta anticrisis) garantiza al Ayuntamiento los 3 millones de euros necesarios para acometer unas obras que durarán nueve meses y que, según anunció ayer el concejal de Urbanismo, Francisco Moro, se esperan culminar para las próximas Navidades.

Desde la Plaza de Las Monjas hasta la Casa Colón y la Plaza del Punto se emprenderá una reforma integral que "no condicionará el tráfico actual de la avenida -insistió el alcalde-, porque se mantienen dos carriles centrales abiertos a todo tipo de tráfico, en una zona central que medirá aproximadamente seis metros de ancho". Ahora bien, la semipeatonalización de la Gran Vía conllevará la pérdida de una importante bolsa de aparcamientos que habrá de compensarse a medio plazo con alternativas como el parking de 600 plazas previsto en el Cabezo de la Esperanza.

El previo anuncio de estas obras había levantado polvareda entre los comerciantes de Calles del Centro, entendiéndose en principio que la Gran Vía iba a cerrarse totalmente al tráfico. "Eso ha sido una polémica que se ha creado a partir de un malentendido -recalcó Rodríguez- y todos sabemos que, hoy por hoy, es imposible cerrar al tráfico toda la Gran Vía. El proyecto que hoy presentamos es el mismo que inicialmente enviamos al Estado. No hemos cambiado nada: nuestra intención desde el principio era hacer una semipeatonalización. Para este equipo de Gobierno es una profunda satisfacción poder llevar a cabo ahora una obra tan emblemática, una entrada al centro de la ciudad que ya no será gris y dura sino que, junto al Ensanche, convertirá a Huelva en una de las ciudades más bonitas de Andalucía".

¿Estamos -como también se planteó- ante un paso previo a la peatonalización total de la avenida a más largo plazo? Según confirmó ayer el regidor, no es esa la previsión. De momento. No obstante, este año se elaborará un estudio integral de tráfico en la ciudad con el consenso de los agentes sociales y especialmente del colectivo de Calles del Centro. "El gran proyecto de peatonalización desarrollado en los últimos años -apuntaron desde el Consistorio- y las obras proyectadas en este sentido, en las calles Miguel Redondo y San Francisco, además de la reforma de la Gran Vía obligan a la elaboración de este estudio para reorganizar toda la circulación, analizando posibles cambios de sentido, límites de velocidad, restricciones o modificaciones de uso y nuevas señalizaciones".

Con las obras que arrancarán en la Gran Vía entre marzo y abril se construirán dos grandes pasillos peatonales a cada lado para unir la remodelada Plaza de las Monjas con la nueva Plaza del Punto, cuya reforma se ejecutará en paralelo.

La actuación abarca una superficie de 11.800 metros cuadrados que quedará totalmente lisa, llana y uniforme, sin desniveles ni bordillos de ningún tipo, en el que la utilización de diferentes tipos de pavimento, el alumbrado público y la jardinería bastarán para distinguir los recorridos destinados al tráfico de los reservados al peatón.

Para primar el uso peatonal de la avenida, se crearán pequeñas zonas de estancia, ensalzando los accesos a los emblemáticos espacios libres de los extremos y construyendo una gran plaza, a los pies del Ayuntamiento, ampliada hasta el viejo edificio de Hacienda. La nueva Plaza de la Constitución se pavimentará con piezas de travertino rojo, las mismas que se han utilizado para reformar la Plaza de Las Monjas, reforzando la jardinería y el mobiliario urbano de la zona con palmeras y arbolado, bancos y papeleras, iguales que los del resto de la avenida, pero en mayor número y generando cuatro zonas de estancia, para marcar los límites de la plaza.

La solería elegida para los pasillos peatonales son piezas de mármol Sierra Elvira en un tono gris'. La peatonalización cubrirá todo el espacio lateral, desde la zona cubierta por los soportales hasta el límite del carril de circulación, eliminado por completo las zonas de aparcamiento. El carril de circulación se pavimentará con adoquín de granito de color gris claro.

Para separar la zona peatonal de la circulación rodada se utilizarán palmeras, combinadas con otros árboles de gran porte, alojados en alcorques y farolas de doble luminaria de acero galvanizado. El alumbrado público se reforzará con faroles colgados bajo los soportales.

La ordenación de la jardinería, alineando la arboleda combinadas con farolas, con carácter secuencial, ayudarán junto al pavimento, a definir los distintos espacios.

La unión de la Plaza del Punto con la Casa Colón se pavimentará con piezas de granito de diferentes tamaños, el mismo que se va a utilizar en la reforma proyectada.

El proyecto incluye también la renovación completa de las redes de saneamiento y abastecimiento de aguas, así como las redes de todos los servicios, de luz, gas, telecomunicaciones y semáforos.

Además, se contempla la instalación de contenedores soterrados de 1.100 litros con apertura mediante plataforma elevadora.