Hoy queremos compartir con vosotros un tema que nos encanta porque implica ayudar a los animales de la mejor forma posible: abriendo las puertas de nuestro hogar y hacer que formen parte de nuestra familia.Muchos de vosotros seguramente os habéis planteado adoptar un animal y otros muchos seguro que ya lo habéis hecho. Queremos explicar un poco en qué consiste el proceso para ayudaros a tomar la decisión más acertada.

Lo primero que debemos plantearnos es que desde el primer minuto adoptamos la responsabilidad de cuidar del animal durante muchos años, proporcionándole un buen hogar, una buena alimentación, visitas al veterinario y aportándoles todo lo que necesiten en cuanto a actividad y cariño.

Se trata de una decisión importante, que no debe tomarse sin pensar, ya que después, por desgracia, hay casos de nuevos abandonos, animales adoptados que son devueltos nuevamente, con suerte, a una casa de acogida, y en el peor de los casos, a la perrera. Imaginad lo que supone para ese animal pasar varias veces por un proceso de abandono, de sentirse en una casa a estar en el frío suelo de una jaula, solo nuevamente y muy asustado. Es impactante ver las caras de esos animales cuando tienen que sufrir esto.

Debemos tener en cuenta que un perro suele vivir entre 12 y 15 años y en los gatos la esperanza de vida supera los 15. Durante estos años pueden aparecer nuevos miembros en nuestra familia, podemos cambiar de casa o estilo de vida por determinadas circunstancias y, a pesar de todo esto ¡nuestra mascota debe permanecer a nuestro lado siempre! A la familia no se le abandona ni se deja de lado.

Durante el primer año de vida se concentran muchos gastos: vacunas, microchip, desparasitaciones, pruebas de enfermedades, esterilización, compra de accesorios (camitas, comederos, bebederos, transportín, juguetes… )

Es importante saber que la mayoría de las asociaciones piden un importe a la hora de adoptar un animal. No debemos extrañarnos, ya que lo que se pide es el importe de lo que se la haya realizado al animal, si se ha vacunado, se ha colocado el microchip, se ha esterilizado… De esta manera ayudamos a que esa asociación pueda cubrir los gastos del animal y puedan seguir ayudando a muchos otros.

Debemos tener en cuenta que la mayoría de las asociaciones no reciben ningun tipo de ayuda por parte de las autoridades, por lo que es importante aportar nuestro granito de arena para que puedan seguir realizando la labor tan importante que desempeñan.

Es importante también que aceptemos que tanto los perros como los gatos necesitan un tiempo para adaptarse a su nuevo hogar. Es bueno adoptar unas pautas básicas de educación, ya que así mejoraremos la comunicación entre nuestra mascota y nosotros, pero se necesita tiempo por ambas partes. ¡Se paciente!

Puede que necesitemos adaptar la casa a nuestra mascota en pequeñas cosas, como poner fuera del alcance de nuestro peludito plantas o productos tóxicos, proteger ventanas o balcones para evitar accidentes creando así un espacio seguro, retirar objetos que pensamos puedan romper… Con paciencia encontraremos la manera de crear una convivencia perfecta.

Una vez que nos hayamos planteado todas estas cosas contactaremos con la asociación responsable del animal por el que hayamos optado. Lo normal es que nos envíen un cuestionario con unas preguntas básicas para poder conocernos un poquito mejor y, si es posible, visitarnos para tener una conversación en persona y así poder conocer también a nuestra futura mascota. Todos estos pasos son importantes, ya que ellos deben asegurarse que el animal va a un lugar seguro y con una buena familia, intentando, por supuesto, que sea para toda la vida.

Ante cualquier problema que surja y ante el que nos veamos desbordados (no conseguimos una buena adaptación en casa, el animal enferma y necesitamos ayuda) es necesario hablar con los responsables de la adopción del animal, ya que nos ayudarán en todo lo posible a solucionar las pequeñas cosas que vayan apareciendo.

El animal siempre irá identificado con su microchip, que en muchos casos se mantendrá a nombre de las asociación responsable hasta que consideren oportuno hacer el cambio de propietario definitivo. Normalmente, transcurrido un periodo de tiempo prudencial en el que la adaptación del animal haya sido positiva, y todo transcurra sin inconvenientes, el animal pasará a vuestro nombre definitivamente.

Esto es algo completamente necesario, ya que, por desgracia, en algunas ocasiones los animales son llevados a perreras o regalados a terceras personas porque el nuevo propietario no termina aceptando al animal.

Si os estáis planteando adoptar un animal, ¡adelante! No os arrepentiréis, estaréis salvando su vida y enriqueciendo la vuestra, ganado un compañero inseparable para siempre.