La obra social, la joya más preciada de la Coronación de la Amargura en Huelva

La Coronación de la Virgen de la Amargura no tendría razón de ser sin la existencia de la obra social que le acompaña a través de su Comisión de Caridad. El camino hasta el 17 de junio ha sido una preparación para las almas de todos los hermanos que han puesto su grano de arena solidarizándose con El Amor de la Amargura (Charitas Amaritudine), que ha volcado su corazón en el proyecto Educar para crecer, destinado a los más pequeños.

El amor de la Virgen, tal y como el de una madre, ha quedado reflejado en el acompañamiento de niños y adolescentes en situación de exclusión social en Huelva, convirtiéndose en la jova más preciada de su corona. Una obra que se ha realizado de la mano de Cáritas Diocesana con la que transformar en cariño y ayuda la fe que la ciudad derrocha por la Amargura ha sido mucho más fácil.

Los Hermanos que se ofrecieron para el voluntariado adquirieron un compromiso junto a la Hermandad con los más pequeños a los que les dieron el amparo y la atención que necesitaban centralizándose en la barriada de la Navidad, Las Colonias, Marismas del Odiel y barriada del Carmen. Han sido 26 personas las que participan de forma directa para cubrir las necesidades de los usuarios, que se han encontrado resguardados bajo el manto de la Virgen de la Amargura con motivo de esta iniciativa de la cofradía.

El objetivo del proyecto que se está llevando a cabo desde hace más de un año es trabajar con 35 niños y adolescentes de forma directa y con 27 familias a las que pertenecen, de forma indirecta para acompañarlos durante su época de crecimiento y aprendizaje además de colaborar con los materiales necesarios para poder llevar a cabo el proyecto tanto a los que formen parte de la infraestructura, como el material didáctico de apoyo a las actividades formativas y lúdicas o alimentación.

Desde el equipo de Caridad, han incitado a la participación a todos los grupos que forman la histórica Hermandad del Nazareno. Muchos de ellos se han volcado con el proyecto como se puede evidenciar con la visita de los costaleros de la Virgen, que fueron referentes para los jóvenes y dieron ejemplo de amor por la Amargura. Por otro lado, la colaboración de los músicos de la banda con el taller musical también fue un momento entrañable, donde descubrieron los instrumentos que suenan durante la procesión y la entrega que ponen durante todo el año para preparar todo el repertorio de marchas. Además, se han llevado a cabo más talleres de acompañamiento como el de cocina a las madres, de informática a los niños, sobre prevención de riesgos o el de la campaña de libros destinado a fomentar la lectura.

En el marco de Educar para crecer se han acompañado a los jóvenes de diferentes edades a fomentar las actitudes orientadas a la formación, el rendimiento escolar, la dotación de habilidades sociales, potenciar la educación en valores y prevenir el abandono escolar. Todo esto con el objetivo de asegurar un futuro mejor para todos los participantes.

En este proceso ha tenido un papel destacado la Comisión de Caridad de la Obra Social de la Hermandad, que tiene por nombre “Jesús Nazareno”. Esta Comisión se constituyó a finales del año 2019, siendo una de las primeras actuaciones de la actual Junta de Gobierno.

El amor por la Virgen de la Amargura es otro de los pilares que mueven esta obra social y de la que algunos de los usuarios se han hecho partícipes pidiendo poder acompañarla el Viernes Santo o hacerse hermanos. La solidaridad es la que impulsa la Coronación Canónica de la titular de la cofradía y por ello, han señalado que el camino hacia el momento culmen en 17 de junio “no se puede entender sin antes salir al encuentro de los más necesitados, tal y como hizo nuestra Madre tras la Anunciación, salir al encuentro de su prima Isabel para ponerse a su servicio”.

La Hermandad del Nazareno ha elegido este proyecto como forma de devolver el amor de la Virgen, entregando amor al prójimo a todos los que necesitan y rindiéndole homenaje a su madre que será Coronada bajo la atenta mirada de toda la ciudad en unos días.