Raúl Galbarro no se sentará más en el banquillo: tres partidos de sanción tras ser expulsado en Marbella

Huelva/El Marbella-Recreativo de Huelva de la pasada jornada ha traído mucha cola. El resultado de los albiazules, unido a la polémica actuación arbitral de Angelov Borisov, marcó el encuentro en la Dama de Noche. Un partido que el Decano comenzó ganando, pero que se llevó finalmente el equipo de Carlos de Lerma y dio un paso hacia la salvación. Parece que el resultado fue lo de menos cuando la imagen de Adrián Fernández en La Maestranza, mientras los albiazules se jugaban la vida en la Costa del Sol, inundó las redes sociales.

El trencilla búlgaro no pasó desapercibido, al igual que sucedió en el Recre-Betis Deportivo cuando anuló un gol legal a David del Pozo. La historia volvió a repetirse. Tan solo corrían 12 minutos en el marcador, cuando Angelov Borisov mostró la primera cartulina amarilla a un jugador albizul: Dani Romero vio la amarilla por "derribar de manera temeraria a un contrario en la disputa de balón" recogió en el acta.

Tan solo cuatro minutos más tarde, Zelu también recibió amarilla por "encararse con un adversario sin llegar al insulto o la amenaza", la quinta para el de Jerez que no estará disponible en el duelo de este sábado con el Mérida.

Pasada la media hora de juego, el Recreativo de Huelva se quedó con un hombre menos. Romero vio la segunda tarjeta por "derribar a un contrario evitando un ataque prometedor en la disputa del balón". Por ello, el canterano cumplirá con un partido de sanción "por doble amonestación y consiguiente expulsión, con multa/s accesoria/as en aplicación del artículo 52 CD", según ha publicado el Juez Disciplinario Único.

Antes del descanso llegó la siguiente expulsión, Guillermo Centurión tuvo que abandonar el banquillo del Marbella Football Center por "ponerse en pie estando en el banquillo y protestar de manera airada y levantando los brazos una de mis decisiones". Por este motivo, el guardameta tiene "dos partidos de suspensión por protestas al/a la árbitro/a, principal, asistente o cuarto árbitro/a, con multa/s accesoria/as en aplicación del artículo 52 CD".

Rubén Serrano también fue expulsado. Angelov Borisov expulsó al central por "derribar a un adversario evitando una ocasión manifiesta de gol fuera de su área penal". Este sábado, el de Puebla de Guzmán no estará disponible por "expulsión directa durante el partido, con multa/s accesoria/as en aplicación del artículo 52 CD.".

No fueron las únicas expulsiones. En el descanso, Pedro Agustín Pájaro Merino, médico del club albiazul, también tuvo que abandonar el banquillo por "protestar una de mis decisiones de forma airada, chillando y levantándole los brazos a mi árbitro asistente nº2 cuando este se dirigía hacia la zona de vestuarios". La polémica parecía estar servida, pero el colegiado no se conformó. Por esta actuación cumplirá "dos partidos de suspensión por protestas al/a la árbitro/a, principal, asistente o cuarto árbitro/a, con multa/s accesoria/as en aplicación del artículo 52 CD".

Quien no podrá sentarse en el banquillo tampoco para lo que queda de temporada será Raúl Galbarro. El técnico sevillano, en el 68, tuvo que dejar de dar órdenes desde la banda al ver la roja directa por "salir del área técnica gritando y gesticulando, protestando una de mis decisiones de forma airada y dirigiéndose hacia mi asistente 1". Además, Borisov añadió en el acta que "una vez expulsado en el minuto 68, D. Raúl Galbarro Gutiérrez no se dirigió hacia la zona de vestuarios, quedándose durante cinco minutos detrás de su banquillo dando instrucciones a sus jugadores".

El Juez Disciplinario Único para competiciones no profesionales interpone una sanción de dos partidos por "protestas al/a la árbitro/a, principal, asistente o cuarto árbitro/a, con multa/s accesoria/as en aplicación del artículo 52 CD" y uno más por "no dirigirse al vestuario tras ser expulsado/a, con multa/s accesoria/as en aplicación del artículo 52 CD."

A consecuencia de todo lo ocurrido durante el encuentro, Angelov Borisov, también describió en el acta que, una vez finalizado el partido en la Dama de Noche, "cuando nos disponíamos a ducharnos en nuestro vestuario que estaba situado al lado del vestuario del Real Club Recreativo de Huelva se realizaron varios golpes en nuestra pared con gritos los cuales no pudimos identificar".