Las bodegas amparadas por la Denominación de Origen Condado de Huelva han visto reducidas sus ventas, desde el inicio de la crisis sanitaria por el coronavirus, en torno a un 90 % y ahora se limitan a los pedidos que se realizan por internet. Así lo indicó el presidente del Consejo Regulador Manuel Infante, quien precisó que “nuestra principal plataforma de comercialización es el canal Horeca, casi el 80 % lo vendemos a bares, restaurantes y cafeterías que actualmente permanecen cerradas, por lo que los pedidos que había se han cancelado y no hay nuevos”.

A esta pérdidas hay que sumar las derivadas de las ventas que supone el enoturismo, que se realiza directamente en las bodegas o en el Centro de Interpretación del Vino por personas que vienen a visitar estos espacios, que también cerraron sus puertas con el inicio de la crisis sanitaria.

Asimismo, tampoco tendrán este años los ingresos que generan con celebraciones como la Feria de Abril, El Rocío y otras tantas romerías que se celebran en la provincia de Huelva y se han cancelado. Por tanto, la única opción de venta que en estos momentos tienen los bodegueros es la que se realiza a través de internet que y que mantienen no por rentabilidad, sino para no dejar de surtir a sus clientes”.

Cuestionado por el plan de desescalada, Infante ha indicado que “aún no lo vemos, habrá que ver cómo se desarrolla para determinar como influye en la reactivación de las ventas, pero hoy por hoy la situación es grave”. Una situación, ha indicado, que “posteriormente va a afectar al campo porque en función de al precio que se venda el vino va a ir el pago de la uva en vendimia”.