"No he pegado ojo en toda la noche no fuera a ser que esa Puerta del Príncipe fuese solo un sueño"

“Si te digo que me hubiesen gustado más cuatro orejas que tres, estaría mintiendo, pero íntimamente sé que esa sola oreja en el primero tiene un valor muy especial porque Sevilla es una plaza muy importante y le doy el valor que se me exija como alguien que cortó el año pasado dos orejas. Fue una petición muy fuerte de la segunda oreja, es verdad. También lo es el que hay un enorme respeto por mi parte para el palco y para el público que ayer me otorgó tantas cosas importantes para mi vida ”.

Así arranca esta charla con quien hoy es máxima novedad en la temporada. David lo expresa a través del teléfono. Está en su casa, con su familia. Habla sin atropellarse en la euforia. Pero hay alegría en su voz cuando le llamo para hablar con él.

Anoche seria noche de arroz y gallos…la euforia de todos los que ahora llegan. Incluso de los que casi nunca estuvieron…pero es precioso que eso le ocurra a un torero que anoche no pudo pegar ojo porque como dice “no fuese a ser solamente un sueño y me despertase en otro sitio. Porque es tan bonito lo de ayer que hoy ando flotando y pensando ¡Que suerte que me haya tocado vivirlo!”, cuenta David mientras me dice que se marcha a poco de terminar esta pequeña entrevista cuando arrancaba la mañana a Sevilla. “Hoy me toca atender especialmente a todos los que reclaman declaraciones pero sobretodo me hace ilusión almorzar con Andrés (Roca Rey) que me ha invitado y por supuesto que me hace ilusión”.

Compañerismo y apoyo. Ayer dos gallos buscando pelea. Hoy la nobleza, porque es lo que toca, de dos profesionales que han compartido todos los escalafones.

“Muchos hablan cosas desde la euforia o no sé qué sentimientos; que no sé porque con Andrés tengo una buena amistad y por justicia te digo que de él salió pedirme en ese cartel de feria. Él fue quien reivindicó justicia para mí después de las dos orejas de año pasado y se lo agradezco públicamente. Después frente al toro lo más sano es competir y todos los que nos vestimos de toreros lo sabemos”.

¿Comentasteis algo durante la corrida?

Claro que sí. Vino a felicitarme, a decirme que lo disfrutara, que ayer era mi tarde y que se alegraba que hubiese ocurrido así. Es un torero grande y grande también como persona. Después está el toro y ya sabemos que cada uno tiene que ir a lo suyo. Pero sí, estoy profundamente agradecido a su gesto y contento conmigo porque aproveché mi oportunidad”.

Sería mezquino obviar que Andrés ha sido quien pidió justicia para las dos orejas que corté el año pasado en esta plaza.

Hablas de la corrida, del lote. Dos muy diferentes pero importantes en lo que te ofrecieron.

“Por supuesto. El sexto fue excelente, con ritmo, transmisión, nobleza y muy explosivo en su acometida. Un gran toro que me dejó expresar ese toreo que me ha ido perfilando todos estos años. Me sentí muy a gusto y pensé que era la oportunidad de cobrar un triunfo grande si le hacia las cosas bien. Ahora, si te digo que como profesional me llena más la importancia de cuajar al primero porque era un animal con buenas condiciones pero que el público no terminaba de creer y que la faena pudiera crecer tanto. Creo que lo entendí, aposté por las cosas buenas que le intuía y a partir de ahí el animal terminó por sacar un fondo bueno y cuando cobré la estocada yo sabía que habían pasado cosas importantes entre él y yo”.

Bueno, hoy es día de euforias. De charla entre apoderado y torero. Que te cuenta José Luis.

“Pues lo propio después de un triunfo. Su alegría. Que ha sido abrumador el teléfono, las llamadas de todos sitios, las felicitaciones…un no parar todo el toreo. Llevamos andando juntos un camino donde también él ha puesto la importancia de que lleguen cosas que han servido para conseguir lo de ayer y pienso que ahora deben responder otros ante lo que ha pasado. Lo más importante es esta felicidad inmensa que estamos viviendo. A partir de mañana espero que nos llamen para ofrecernos torear". Y lleva razón el torero porque por ahora solo está por ahí Sahagún y Huelva”.

Me cuenta José Luis Pereda que no deja de sonarle el teléfono por felicitaciones. Mañana confió en que le llamen para ofrecernos contratos.

Bueno, no solo tú porque Huelva anda desatada por entero con ese triunfo grande de ayer tarde.

“Claro y es precioso ver que tu triunfo alegra a tanta gente como ha venido apoyándome, creyendo que era posible mirar al futuro, que nunca me han dejado por atrás, que me han seguido en los momentos donde lo he necesitado y que ahora pueda devolverle algo de tanto como me han dado es una de las cosas más bonitas e importantes para mí. Huelva, Trigueros, gente que ni me conoce y que hoy está alegre por mi triunfo. Claro que es grande que eso ocurra. Me hace feliz”.

La vida sigue. Hoy no es igual que hace dos días para David. Ahora ya a menos gente le suenan menos raras las dos orejas del año pasado a Tabarro. Hoy hay menos 'santo tomás' creyendo en la madurez de un torero honrado. Buena cosa es la fe.