El hogar de discapacitados El Cristo Roto cumple 25 años

La casa-hogar El Cristo Roto de Gibraleón, de la asociación de Obras Cristianas, celebra el próximo 4 de octubre su 25 aniversario. Durante todos estos años la institución ha estado al servicio de las personas discapacitadas.

En 1986 El Cristo Roto abrió sus puertas para servir "con gozo cristiano y jubiloso servicio al necesitado", un proyecto de amor al discapacitado psíquico que se hizo realidad por el empeño de todas las personas que formaban la asociación de Obras Cristianas de Gibraleón, presidida por el sacerdote Diego Suárez Mora.

Hoy en día, más de centenar de usuarios encuentra en la casa-hogar El Cristo Roto un servicio que se convierte en manos de los trabajadores -hasta un total de 82- bienhechores, voluntarios y socios de honor, "en un milagro de amor al prójimo discapacitado en cuyo rostro se refleja el de Jesucristo mismo", según manifiesta la organización en un comunicado.

Para conmemorar el 25 aniversario, los componentes de la Asociación de Obras Cristianas de Gibraleón celebran hoy, todos juntos y como una gran familia, una Eucaristía de Acción de Gracias en la iglesia de Santiago Apóstol de la localidad olontense, en torno a las 12:30.

El acto religioso está presidido por el obispo de Huelva, José Vilaplana Blasco. A continuación, sobre las 14:00, está previsto tener un almuerzo en el salón de celebraciones El Manantial, justo al lado de la casa-hogar El Cristo Roto. Tras la sobremesa, los chicos y chicas de El Cristo Roto, en un acto organizado por ellos mismos con la ayuda inestimable de sus monitores, mostrarán a todos los asistentes al evento su alegría y capacidad de hacer felices a los demás en una fiesta fin de evento llena de buen espectáculo.

El Cristo Roto desarrolla una intensa e interesante actividad para mantener abiertas sus puertas. Una de las más conocidas, que mayor aceptación y reconocimiento popular tiene es la representación de La Pasión Viva y Musical de Cristo.

Desde 1978 se viene representando en los jardines de la casa hogar con un lleno total durante todos los días de representación. Más de 200 personas dan vida cada Semana Santa a los momentos culminantes, más intensos y dramáticos de Jesús de Nazaret en 15 escenas distintas. La iniciativa de la asociación de Obras Cristianas de Gibraleón es una idea original del sacerdote Diego Suárez Mora, que se encarga de hacer el guión, dirigir y desarrollar la escenografía de la muestra.

Según Diego Suárez, La Pasión Viva de Cristo es "una lectura literal del Evangelio" representada en escenas.