La segunda sesión del juicio que se sigue en la Sección Tercera de la Audiencia de Huelva por delitos de apropiación indebida y alzamiento de bienes en el seno de Gran Hotel El Coto SA (Ghecsa) de Matalascañas dejó ayer testimonios relevantes como los del acusado M.B.C., miembro de la comisión liquidadora de la empresa, y de varios acreedores perjudicados.

El primero respondió tras leer las preguntas planteadas por las partes (por escrito) debido a sus dificultades de audición. Sobre una de las cuestiones dirimidas en la vista, que es si el dueño del hotel –M.B.G., administrador de Bamar 2000 y accionista mayoritario de Ghecsa y Alfa Beta Inversiones Hoteleras– controlaba la comisión liquidadora a través de tres de sus cinco miembros, M.B.C. reconoció que fue nombrado por este acusado y que seguía sus instrucciones, si bien negó haber cometido actividad delictiva alguna, como indican fuentes judiciales a Huelva Información.

Entre los testigos estuvo el contable de Ghecsa, al que el miércoles apuntó el principal acusado, M.B.G., como la persona que ordenaba los pagos de la mercantil suspensa. Este desmintió ese extremo y reculó cuando manifestó que no sabía quién tenía las llaves de la caja fuerte en la que supuestamente se guardaba el dinero de alquileres y ventas patrimoniales, mientras que durante la instrucción de la causa sí había señalado al tercer acusado, A.V.G., y al letrado que representa a M.B.G.

El testigo expresó que efectuaba los apuntes contables siguiendo las instrucciones del dueño del hotel El Coto y que no hacía comprobaciones. Además, declaró que la mayor parte de los pagos en la comisión liquidadora se hacían en efectivo para no pagar a los acreedores.

Si la celebración del plenario no finaliza hoy, se pospondrá para los días 12 y 13 de abril

Se escucharon en la sala otros dos testimonios de acreedores, quienes precisaron que siempre se hizo caso omiso a sus requerimientos y que la comisión liquidadora no les informaba de nada. Ambos refirieron que se han quedado en la ruina, mientras que uno de ellos fue especialmente crítico con el propietario del hotel El Coto, y desmenuzó la "labor de control" que M.B.G. ejercía sobre la comisión liquidadora.

El último de los testigos fue Ismael Peidró, acreedor, parte damnificada y uno de los empresarios catalanes que organizó la construcción del establecimiento hotelero en Matalascañas. Explicó que todo lo acontecido durante 20 años en el seno de dicha comisión, en la que se encontraba en minoría, "ha sido una farsa".

La jornada de hoy estaba llamada a ser la última de la vista oral, pero puede que no sea así. Se han acumulado tres testigos y comparecerá el perito que realizó el informe sobre el manejo de la contabilidad de Ghecsa, a lo que habría que sumar los informes finales del fiscal y los abogados de la acusación y la defensa.

En esta sesión se verá si es posible que el juicio finalice hoy. De no alcanzarse este objetivo, la presidenta de la Sección Tercera, Carmen Orland, propuso a las partes que el plenario continúe dentro de un mes, los días 12 y 13 de abril, ya que hasta entonces no hay ninguna sala de la Audiencia disponible.