El columbario de El Rocío acogerá las primeras cenizas en el año 2018
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Empezará a construirse en el primer trimestre de 2017 con un presupuesto de 2,5 millones de euros
El edificio se ubicará en una parcela pública en el Barrio de las Gallinas
Dice un dicho popular que "la muerte tiene tal certeza de su victoria que nos da toda una vida de ventaja". Quienes viven del negocio funerario saben que la parca convertirá a todo ser humano en un cliente potencial de los numerosos servicios que prestan. Y entre ellas, la opción de la incineración gana adeptos, lo que ha obligado a las compañías a reformular sus estrategias comerciales para adaptarlas al nuevo consumidor.
Aunque no lo parezca, existen personas que están dispuestas a pagar mucho dinero por cumplir sus últimas voluntades. Tanto como para llegar a abonar 71.500 euros, que es lo que costará que los restos de una familia puedan descansar en uno de los lugares más privilegiados de España, como es la aldea de El Rocío.
Ese es el coste del nicho estrella del columbario rociero que se proyecta en la aldea almonteña, que comenzará a construirse en el primer trimestre de 2017, con un presupuesto de 2,5 millones de euros y un periodo de ejecución de entre 12 y 18 meses. El edificio se situará en una parcela pública en el conocido popularmente como Barrio de las Gallinas, junto al hoy moribundo (está cerrado y sin actividad) Museo de El Rocío.
Antonio Ortiz, director del proyecto Granero SA, empresa que construirá y explotará el servicio, quiso matizar que la construcción del columbario es anterior al anuncio de la Iglesia católica de prohibir a sus fieles el esparcimiento de las cenizas de los difuntos, al objeto de que los restos mortales descansen en sitios sagrados.
"El concurso público se produjo en 2014", por lo que Ortiz mantiene que en la viabilidad del negocio no ha influido el anuncio de la Santa Sede. La firma castellanomanchega apunta que el retraso en el inicio de las obras obedece a que se encontraban a expensas de ver como se resolvían los nuevos accesos al Rocío, después de que la nueva variante prohibiese el tráfico de vehículos desde el Puente de la Canariega, entrada natural a las instalaciones. Esta infraestructura será demolida para cumplir con la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) de la carretera de circunvalación, en el que se invirtieron 16 millones de euros con fondos europeos. Los nuevos accesos a la A-483, cuya licitación por 1,4 millones de euros salió a concurso hace escasos días, corregirán esta situación, por lo que las obras arrancarán en breve.
Al ser una concesión administrativa, el Ayuntamiento se embolsará anualmente en torno a 50.000 euros anuales, a la par que se asegura para sus ciudadanos o hermanos de las filiales rocieras la posibilidad de disfrutar de una rebaja en los precios. Estos fluctúan entre los 1.265 y los 5.315 euros en nichos en los que podrán encontrar descanso eterno hasta cuatro urnas. Quienes busquen precios más económicos también tienen la posibilidad de optar por un periodo de 25 años, o simplemente esparcir los restos de sus seres queridos en el cenizario común por 600 euros.
El Ayuntamiento ya intervino en 2005 cuando se popularizó el que los vecinos esparciera sus cenizas frente a la icónica marisma almonteña. Preocupado por la posibilidad de que proliferasen las cruces y coronas a lo largo del perímetro marismeño, la corporación municipal se apresuró a redactar y aprobar una ordenanza municipal que preveía sanciones de hasta 15.000 euros a quienes esparciesen sus cenizas en el entorno rociero. Como alternativa a las medidas coercitivas, la institución habilitó un espacio en el Paseo Marismeño para quienes quisieran cumplir con los últimos deseos de sus familiares de fundirse con el entorno marismeño.
La empresa castellanomanchega tiene una larga tradición en el diseño, fabricación y distribución de monumentos funerarios; amén de la planificación construcción y gestión de columbarios en iglesias, catedrales, criptas, ermitas y cementerio.
Aunque el edificio no estará operativo hasta el 2018, la firma funeraria ha habilitado una página web en la que informa sobre las tarifas y la posibilidad de reservar los nichos. Ortiz adelantó que sin más publicidad que la página web y el eco que la propuesta ha encontrado en los medios de comunicación, cerca de un centenar de personas ya se han interesado por reservarse un lugar privilegiado en la aldea. El deseo de descansar frente al Santuario de la Blanca Paloma, que concita la veneración de millones de personas en el mundo, será posible en breve.
Respeta la arquitectura de la aldea
Una de las prioridades de Granero SA a la hora de diseñar arquitectónicamente el columbario fue perpetuar la fisonomía de la aldea y que el inmueble se fundiese con el entorno. Antonio Ortiz, director del proyecto, destacó que se optó por un diseño libre de extravagancias modernistas "que desde el exterior se confundiese con cualquier casa hermandad" de las que se encuentran diseminadas por el entramado urbano de la aldea. En efecto, a la entrada le precederá un bello parque y cuatro torres se levantarán sobre los flancos delanteros y traseros del edificio, los cuales estarán coronadas por una espadaña donde encontraran cobijo las campanas que repicaran sus réquiem en vez del sonido características de las casas hermandad cuando se aproxima la Reina de las Marismas. Incluso en el interior los visitantes se podrán sorprender "con un patio andaluz" presidido por "un pozo artificial que simulará la marisma". Sólo los pasillos revelarán que se trata de un templo donde los fieles encontraran el merecido descanso eterno.
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