Provincia

El castañar de Huelva reclama la declaración de zona catastrófica tras los temporales

  • La Asociación de Empresarios de Galaroza estima daños en uno de cada cuatro árboles

  • Asaja-Huelva calcula pérdidas del 40% tras el paso de las borrascas ‘Alex’ y ‘Bárbara’

El paso de las borrascas Alex y Bárbara por Huelva sigue motivando reacciones ante los daños que ha ocasionado durante el mes de octubre en el castañar del Parque Natural de la Sierra de Aracena y Picos de Aroche, donde los municipios afectados van a iniciar los trámites para solicitar recursos económicos que ayuden a paliar las consecuencias de este fenómeno meteorológico en los campos serranos.

Para ello, el Ayuntamiento de Fuenteheridos, uno de los más castigados, ya se ha puesto en contacto con los municipios castañeros de la zona, según ha manifestado su alcalde, José Luis Pérez Tapias, con el fin de solicitar ayudas a las administraciones tras las “graves consecuencias” que, sobre todo, la borrasca Bárbara ha ocasionado en los castaños y las pérdidas en la producción del sector, además de pedir la declaración de “zona catastrófica”.

Del mismo modo, la Asociación de Empresarios, Comerciantes y Autónomos de Galaroza van a reclamar compensaciones económicas ante lo que consideran como “graves daños al arbolado y a la cosecha”, por lo que la entidad ha solicitado al Ayuntamiento cachonero que “lidere el procedimiento, que podría llegar a la calificación como zona catastrófica si se dan los requisitos”, y le ofrecen su total colaboración.

Tras los destrozos del temporal, los empresarios de Galaroza han manifestado su “honda preocupación por el estado en que ha quedado nuestro arbolado, ya que ha habido árboles centenarios que han sido arrancados por pie, infinidad de ramas cortadas, pendones caídos, troncos pelados o tronchados y otras consecuencias que afectan a nuestro medio ambiente y a nuestro modo de vida”.

En la provincia hay unos 270.000 castaños con una edad media de 350 400 años y algunos de ellos milenarios

Una vez evaluado el estado de los árboles, los castañicultores pertenecientes a la entidad empresarial cachonera han calculado que “uno de cada cuatro castaños del término municipal han podido quedar dañados, lo cual repercutirá negativamente en la cosecha, que ya de por sí venía lastrada por las adversas condiciones meteorológicas y por las enfermedades de la arboleda”.

La organización agraria Asaja-Huelva ha calculado en un 40% las pérdidas en la producción del castañar onubense de este año como consecuencia del paso, sobre todo, de la última borrasca, Bárbara, que hace unos días dejó fuertes lluvias y violentas rachas de viento que han arrancado las ramas de los castaños y arrojado el fruto al suelo, cuando estaba a punto de ser recolectado.

La asociación de agricultores explica en un comunicado que en el castañar onubense, que es “uno de los más valiosos en cuanto a calidad y singularidades tanto en lo que respecta al producto como al entorno, se producen cada año problemas como los robos o la pérdida de rentabilidad por competencia de otros países y ahora se suman los efectos de un temporal que ha dado al traste con casi la mitad de las expectativas de producción de este año”.

Asaja-Huelva insta a los ayuntamientos a solicitar al Gobierno la declaración de zona gravemente afectada por una emergencia, para que los productores puedan recibir las ayudas que contribuyan a superar una campaña que antes de empezar, ya viene mermada.

Para la organización agraria, “el sector del castañar onubense debe ser urgentemente atendido de forma que se garantice su rentabilidad y se dote de fondos para garantizar el buen estado de los árboles, porque solo así se podrá conservar un ecosistema y un producto representativos de la Sierra de Aracena y Picos de Aroche”.

Asaja-Huelva ha recordado que sigue pendiente de publicación por parte de la Junta del Plan Estratégico del Castañar, vital para proteger un aprovechamiento agroforestal con una carga cultural, medioambiental y económica muy importante para la Sierra de Huelva, y para evitar situaciones como la de la pasada campaña, que fue magnífica desde el punto de vista agrícola, pero encontró un gran escollo en la comercialización de la castaña.

El castañar onubense ocupa casi 5.000 hectáreas, repartidas por los municipios de Alájar, Almonaster la Real, Aracena, Aroche, Castaño del Robledo, Cortegana, Cortelazor, Fuenteheridos, Galaroza, Jabugo, Linares de la Sierra, Los Marines, La Nava, Puerto Moral y Valdelarco. Existen alrededor de 270.000 castaños, con una edad media de entre 350 y 400 años, aunque algunos ejemplares se acercan o superan el milenio.

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