En el corazón de la Sierra de Aracena y Picos de Aroche, ya lindando con la zona norte de la provincia de Sevilla, se halla uno de los municipios más extensos de toda la provincia de Huelva. Desde época remota, Zufre, conocido como el Balcón de la Sierra, ha sabido acoger al visitante y aprender de cuantos han dejado su sello en sus bellas calles y en su vasto terreno. Minera, ferroviaria y agraria esta bella localidad de vías blancas y empedradas le ha otorgado la catalogación de Bien de Interés Cultural, algo que refrenda su numeroso patrimonio arqueológico y megalítico.

Vista de la bella localidad serrana de Zufre.

Entre su actividad agraria, Zufre destaca por su cuidada y tradicional producción de aceite de oliva virgen extra, en especial procedente del cultivo ecológico de la aceituna manzanilla serrana, esto es, sin la utilización de ningún tipo de producto químico. Así, haciendo uso de métodos mecánicos tradicionales y con un cuidado tratamiento del fruto desde la misma recolección a mano, la cooperativa Nuestra Señora del Puerto de Zufre cuenta con el certificado de Industria Ecológica, acreditada por el Comité Andaluz de Agricultura Ecológica.

Así, Zufre ha elegido entre aumentar la producción o centrarse en un producto de máxima calidad con el que darse a conocer y convertirse en centro del aceite de oliva ecológico en la región. Y parece ser una apuesta acertada, más si cabe teniendo en cuenta que la Sierra cuenta con algo más de 2.800 hectáreas dedicadas al olivar, de las que unas 500 pertenecen a miembros de esta almazara, pero, debido a lo escarpado del terreno y las condiciones climatológicas, un olivo da unos 10 kilos de aceituna, mientras que en otros puntos, como en la zona condal puede superar los 80 kilos por árbol.

Un puesto de aceitunas ecológicas en OleoZufre.

Pero no es este el principal escollo que tiene el aceite de la comarca serrana. “Llevamos tres años de sequía y eso el campo lo nota mucho, pues no produce lo que tendría que producir”, lamenta el gerente de la cooperativa Nuestra Señora del Puerto, Felipe Garzón. “El cambio climático se nota. Cada vez llueve menos y la producción es menor”, asegura Garzón, quien apunta que “aquí traer canalizaciones es muy complicado por lo escarpado del terreno”. Esto se ha traducido en que en las últimas campañas la producción media ha alcanzado los 70.000 litros de aceite de oliva virgen extra ecológico “cuando hace unos años llegábamos a los 100.000 litros”, destaca el gerente de la cooperativa. De hecho, en la pasada campaña se ha producido casi la mitad en el año anterior. “Poca mano de obra y un rendimiento graso más bajo del habitual por la falta de agua, han sido los motivos de esta caída”, reconoce el empresario. Y es que cuanto más temprana se recoja la aceituna, mayor será la calidad del aceite de oliva virgen extra.