El Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil de Huelva ha abierto una investigación para determinar la responsabilidad de la apertura sin autorización de un camino en el acantilado de dunas fósiles de Médano del Asperillo, en el Espacio Natural de Doñana, y el alcance de los daños ocasionados.

Las obras en la duna están actualmente paralizadas, después de que el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 3 de La Palma del Condado que lleva el caso lo ordenara al Ayuntamiento de Almonte, en cuyo término municipal se localiza.

Desde la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible han indicado a Efe que se está actuando en “estrecha coordinación” con el Seprona en el seno del procedimiento abierto por este servicio de la Guardia Civil para investigar lo sucedido y aclarar responsabilidades. Además, han subrayado que “ni siquiera existe solicitud para la ejecución de estas obras” y, por lo tanto, no existe autorización alguna por parte del Espacio Natural.

La Consejería ha asegurado que actuará, como no puede ser de otra forma, “con total determinación para exigir las responsabilidades pertinentes”.

Las obras de este camino fueron detectadas por el Servicio de Costas, que alertó al Seprona de la Guardia Civil. Las mismas se han llevado a cabo haciendo uso de una retroexcavadora que ha trazado un camino de cuatro metros de anchura, lo que permite a las empresas de rutas a caballo bajar a la playa.