La Sociedad Española de Ornitología tiene cerca de 11.000 socios, mientras que en Gran Bretaña su homologa, la Royal Society for The Protection of Birds, alcanza el millón. Sólo este dato da cuenta de la dimensión y pasión que despierta el avistamiento de aves y, en consecuencia, el potencial que ofrece al sector turístico la posibilidad de seducir a este público con paquetes turístico que les lleve a recorrer los principales humedales de la provincia de Huelva. Es más, el millón de socios engloba únicamente a aquellos que pagan religiosamente su cuota anual a la RSPB, por lo que el número de aficionados es aún mayor a esta cifra. No en vano, la Next Generation Birders está formada por jóvenes ornitólogos internacionales que se han constituido a través de las redes sociales para rejuvenecer la sabia que disfruta de esta pasión.

El nacimiento de esta entidad no gubernamental nació en 2011 y desde entonces ha tenido un crecimiento enorme, no sólo en número de usuarios (cerca de 700) si no en su relevancia social. Sus objetivos son prestar apoyo y formación a los jóvenes pues se consideran abandonados por la mayoría de las entidades conservacionistas de mayor prestigio y reputación del mundo.