Policía y Seprona organizan batidas para atrapar a los perros salvajes

La aparición de una jauría de perros salvajes ha provocado la alarma en la localidad de Punta Umbría, sobre todo después de saber que estos animales causaran la muerte a un potro, como ayer adelantó Huelva Información, y también la de un caballo. A pesar de que se trata de perros peligrosos, nacidos y criados en libertad, no se ha prohibido el acceso a la zona donde suelen aparecer.

Tampoco se ha tenido constancia de ningún encontronazo con personas, aunque lo mejor es intentar evitarlos porque no se sabe cuál sería su reacción. Los perros rondan por el área cercana al picadero local y entre estas instalaciones y las de Salinas del Astur, una zona frecuentada por senderistas y deportivas tanto atletas como ciclistas e incluso por familias que pasan el día en el campo.

Por lo tanto, desde hace unos días, efectivos de la Policía Local y del Servicio de Protección a la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil, así como de una unidad adscrita de la Policía Autonómica, han realizado y organizado batidas para acabar con estos animales. Incluso ayer por la mañana se procedió a la retirada de los cadáveres del potro y el caballo y está previsto que mañana y el martes se vuelva a salir para buscar a los perros.

Según fuentes de la Policía Local, ya se han abatido tres de estos perros y se espera que se consiga abatir al resto en los próximos días. Además, se cuenta con la colaboración de la sociedad de cazadores local, a los que se ha autorizado para ayudar a las fuerzas de seguridad. Los cazadores obtienen frecuentemente un permiso especial por parte de la consejería de Medio Ambiente para abatir a animales salvajes en su zona de caza, pero se da la circunstancia de que en estos momentos, hasta el día 5, no está en vigor. Por ello, se decretó recientemente una orden desde la Alcaldía para dar estos permisos y para organizar estas batidas y acabar con los perros salvajes de manera excepcional.

Parece que los perros pertenecen a una camada salvaje que, hasta el momento, no había dado problemas y se alimentaba de basuras y resto de excursionistas. Pero la escasez de alimento podría haber dado lugar a que se lanzaran a atacar a animales.