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El museo Vázquez Díaz homenajea a Mario León, hijo predilecto de Nerva

  • La muestra acoge medio centenar de obras del pintor, fallecido el año pasado en Sevilla

El museo nervense da protagonismo a uno de sus hijos predilectos.

El museo nervense da protagonismo a uno de sus hijos predilectos. / Juan A. Hipólito

El museo Vázquez Díaz de Nerva muestra durante estos días medio centenar de obras de Mario León en memoria del pintor nervense fallecido en junio del año pasado en Sevilla. El artista formaba parte de la pléyade de firmas que dan brillo y esplendor al lema del que los vecinos de la localidad minera se sienten tan orgullosos: “Nerva, tierra de artistas”.

Un autoretrato del pintor y dos obras de su etapa parisina realizadas en la zona de la Place du Theatre en Montparnasse dan la bienvenida el visitante a las puertas de la sala donde obras protagonizadas por mujeres, toreros, bodegones, cantaores y guitarristas de flamenco, paisajes serranos y mineros se muestran en un baile de colores. Óleos, acrílicos y técnica mixta sobre lienzo, tabla, papel evidencian el dominio que León ejercía sobre diferentes técnicas.

El 7 de agosto de 2010, coincidiendo con la celebración del 125 aniversario de la emancipación de Nerva de Zalamea la Real, la Corporación municipal le hacía entrega del galardón Torre de Nerva. Y el año pasado recibía, por esas mismas fechas, la más alta distinción local de Hijo Predilecto a título póstumo.

Hace un par de años, el Círculo Comercial, sociedad de la que solía disfrutar en sus visitas a Nerva, le homenajeaba con una selecta muestra de obras de diferentes etapas y estilos que lucieron con todo su esplendor en el salón principal de la sociedad mercantil.

En 2014, también por el mes de agosto, León participó con éxito de público y crítica, junto a los pintores Juan Barba y Jesús del Toro, en el museo Vázquez Díaz de Nerva con la muestra Three Artists from España, tras su exitoso paso por la localidad australiana de Broken Hill.

Ahora, el museo Vázquez Díaz vuelve a reconocer una trayectoria plagada de éxitos, como atestiguan los primeros premios conseguidos en el Salón Nacional de Bollullos (1977), la Beca Carrera de la Facultad de Bellas Artes de Sevilla (1979), el Certamen Luz y Sal de San Fernando (1981), el I Certamen José María Labrador (1983), o el Extraordinario Hispanoamericano del V Salón Nacional Vázquez Díaz (1984), por poner tan solo algunos ejemplos.

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