El marinero y patrón de pesca de Lepe Juan Antonio Cordero Coro (55 años), fue este sábado uno de los primeros identificados entre los fallecidos del Villa de Pitanxo, el buque gallego que naufragó durante la madrugada del pasado martes con 24 personas a bordo en aguas de Terranova (Canadá).

Así lo comunicó ayer la subdelegada del Gobierno en Huelva, Manuela Parralo, a la familia del marinero lepero que viajaba a bordo del barco siniestrado, el cual se encontraba en la pesquería del fletán en aguas NAFO, concretamente en el Gran Banco de Terranova del Atlántico Norte, a unos 460 kilómetros al este de Saint John.

La subdelegada del Gobierno en Huelva "está en contacto con ellos para informarles en primera persona de todo el proceso y les ha transmitido el sentido pésame de todos los andaluces y del Gobierno de España, así como todo nuestro apoyo. Es una tragedia que nos ha conmocionado a todos” manifestó en un comunicado de prensa el delegado del Gobierno de España en Andalucía, Pedro Fernández.

Juan Antonio Cordero, que ejercía de segundo patrón en el malogrado arrastrero congelador gallego, era natural de Lepe, estaba casado, tenía dos hijos y le quedaba un mes para jubilarse, siendo de hecho éste en aguas de Terranova su último turno en activo. A pesar de mantener su residencia habitual en el municipio onubense, se trasladaba habitualmente a Galicia para embarcar en cada turno.

Juan Antonio Cordero

Junto con el de Juan Antonio Cordero, fueron identificados otros dos de los nueve cuerpos recuperados: los tripulantes peruanos Rogelio Franco y Miguel Ángel Lumbres, y poco después  la totalidad de los cadáveres, según informó la Delegación del Gobierno de España en Galicia, que indicó que corresponden a cinco marineros españoles, tres peruanos y un ghanés.

En el Vila de Pitanxo viajaban 24 tripulantes, de los que tres fueron rescatados con vida: el patrón del barco, Juan Padín, y su sobrino, Eduardo Rial Padín, así como el joven ghanés Samuel Kwesi, residente en Marín.

En total han sido nueve los cuerpos rescatados por ahora en aguas de Terranova, mientras que otros 12 permanecían hasta la tarde de ayer sábado aún desaparecidos.

Dos de los cuerpos llegaron a tierra canadiense el viernes, concretamente a bordo del Maersk Nexus, que atracó en el puerto de Saint John sobre el mediodía -hora española-. Casi 24 horas después llegaban a tierra los otros siete cuerpos en el buque gallego Playa de Menduíña Dos, junto con los tres supervivientes.

Está previsto que tanto los tres marineros que sobrevivieron al naufragio como el resto de los cuerpos rescatados hasta el momento lleguen a España en los próximos días a bordo de un avión a-400 del Ejército del Aire que fletará este mismo domingo el Gobierno español. La aeronave será recibida en Saint John de Terranova por el embajador de España en Canadá, Alfredo Martínez Serrano, y por las autoridades consulares españolas en dicho país.

La Delegación del Gobierno en Galicia, en nombre del Gobierno español, ha agradecido el "excelente trabajo y compromiso" de las autoridades canadienses y del consulado, así como la colaboración y coordinación con el Grupo Nores, la empresa armadora del barco. El delegado del Gobierno en Galicia, José Miñones, ha reiterado su "total apoyo y pesar" a las familias de los desaparecidos y fallecidos, por los que el Gobierno ha decretado luto oficial el próximo lunes.

Por su parte, la Delegación del Gobierno en Andalucía ha indicado que el presidente del Ejecutivo, Pedro Sánchez, mantuvo en la tarde del viernes una conversación telefónica con el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, en la que le agradeció todos los esfuerzos de las autoridades canadienses en las tareas de rastreo y su buena disposición para retomar la colaboración en las labores de búsqueda.

El vicepresidente de la Junta de Andalucía y consejero de Turismo, Regeneración, Justicia y Administración Local, Juan Marín, ha trasladado "ánimo y fuerza" a los familiares del marinero de Lepe, a los que "acompaño en su pesar por esta trágica y dolorosa pérdida. DEP", ha dicho en Twitter.

El Papa también ha expresado en las últimas horas en un telegrama enviado al arzobispo de Santiago de Compostela, Julian Barrio, su pésame y su cercanía a las familias de las víctimas del naufragio del pesquero gallego en Canadá. Francisco ha expresado sus "sentidas condolencias" y ha calificado de "triste noticia" el naufragio del Villa de Pitanxo, así como ha mostrado su cercanía y su solidaridad "en estos momentos de aflicción", para finalmente confiar a Dios "sus plegarias por el eterno descanso de las víctimas y manifiesta su cercanía a las familias que lloran a sus seres queridos".