Invaden parte de una vía pecuaria para construir casas

La Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía ha determinado que la urbanización que se sitúa en la finca Cuesta del Molino de Hinojos ha invadido parte de una vía pecuaria, la denominada Vereda de Hinojos. El proyecto urbanístico, que se desarrolló durante la etapa del gobierno socialista de Antonio Gil, incluye otras irregularidades como la construcción de cocheras.

Los hechos se remontan a finales de la pasada década cuando el Gobierno de entonces proyectó la construcción de unas viviendas sociales (VPO) en la calle Chucena. La iniciativa fue trasladada al Pleno municipal y aprobada con la mayoría absoluta del PSOE. Sin embargo, la parcela que está atravesada de norte a sur por un colector de aguas pluviales y residuales no contaba con la suficiente extensión para ubicar las 21 viviendas proyectadas, por lo que se incorporó al proyecto un camino existente que daba entrada a tres vecinos colindantes a la finca.

El Pleno aprobó el proyecto en unos terrenos parte de los cuales habían sido transformados en urbanos o urbanizables, donde irían las viviendas, mientras que el resto continuó con la catalogación de rústico. El proyecto urbanístico inicial impedía la entrada a los tres propietarios de las fincas rústicas por lo que tras la protesta de los afectados se modificó el mismo y se suprimieron dos de las viviendas iniciales y en su lugar se proyectó una calle (entrada) de acceso a las parcelas. Las viviendas eran de cerramiento y sin entrada por la parte trasera.

Según denunció un vecino, "la entrega de casas, una de ellas para el teniente de alcalde de entonces y otras para miembros o simpatizantes del partido, se realizó aún sin terminar las obras, con el colector de aguas residuales sin conexión a la depuradora y sin arreglos de la parte exterior. Poco después, los propietarios de las mismas comenzaron a realizar modificaciones como la construcción en una de las casas de una segunda planta sin autorización".

Además, se produjo "un reparto de terrenos entre algunos propietarios, anulando un acerado común del proyecto inicial, como también se ha denunciado, bajo la connivencia del equipo de gobierno socialista de aquella época". Asimismo, se incorporó "un camino, de tal forma que los propietarios de las fincas colindantes deben contar un permiso".

Posteriormente, a la entrada de las cocheras "se construyeron plataformas de hormigón (al parecer sin permiso municipal) enviando las correntías de aguas a las fincas colindantes", lo que motivó también las quejas de sus propietarios.

El pasado mes de septiembre, el Ayuntamiento recibió un informe de las Consejería de Medio Ambiente en el que certifica que las viviendas están intrusadas en la vía pecuaria, informe que ha sido realizado a petición de uno de los propietarios de las fincas colindantes a la urbanización Cuesta del Molino.

La Junta de Andalucía ha informado que al producirse la invasión, el responsable deberá resarcir a la Administración autonómica la parte de dominio público sustraído o en caso de no poder restaurar el daño en el mismo lugar, deberá recuperarse en otro espacio donde cumpla la finalidad de la vía pecuaria.

La urbanización ha llevado parejo la construcción de viviendas encima de tuberías de pluviales y residuales y la recepción de las obras por el Ayuntamiento sin el colector de fecales que unía a la depuradora.