La asociación La Carpa ha presentado una queja ante el Defensor del Pueblo Andaluz en la que denuncia el trato dado a los inmigrantes residentes en asentamientos chabolistas que se vieron sorprendidos este sábado por el incendio forestal declarado en Bonares (Huelva) que afecta también a Lucena del Puerto (Huelva).

En el escrito, al que ha tenido acceso EFE, la ONG, con sede en Sevilla y dedicada a la atención de personas sin hogar, pone en conocimiento del Defensor lo ocurrido durante el plan de evacuación de la población civil durante el incendio, ahora en situación de estabilización. Desde La Carpa se precisa que "son hechos probados" que, ante la amenaza del fuego, la Guardia Civil dio orden de desalojo a los vecinos ocupantes de viviendas, así como a los migrantes ocupantes de chabolas.

También que "en el plan de evacuación se les ofreció a los vecinos ocupantes de viviendas el polideportivo municipal para el refugio temporal, no siendo así con los migrantes a los que se les indicó que deberían permanecer en el monte alejados de sus chabolas".

Igualmente precisan que hasta este domingo la asociación "no tiene constancia de que ni un solo migrante haya sido acogido en el polideportivo municipal ni en ninguna otra estancia pública". Por este motivo han lamentado que la población migrante "quedó expuesta en el monte al humo, a la desasistencia y a la incertidumbre", en una imagen en la que "ha sido imposible no recordar otros tiempos donde en los Servicios Públicos existían diferentes ubicaciones para blancos y para negros".

El objetivo de la queja, han apuntado, es lograr que el Defensor del Pueblo Andaluz llame la atención a los responsables del plan de evacuación para explicar La "con constancia por escrito que estas actitudes xenófobas no caben en los tiempos que corren". EFE ha intentado, sin éxito, recabar la versión sobre lo sucedido de la Guardia Civil, la Subdelegación del Gobierno y la Junta de Andalucía.