Más de 110.000 euros para adecuar el sendero de San Miguel y restaurar el Puente Viejo de Campofrío

La Diputación de Huelva saca a licitación, por una cuantía de 110.162 euros, la adecuación del sendero de la Parroquia de San Miguel y restauración del Puente Viejo sobre el río Odiel en el municipio de Campofrío. La intervención, que se financiará con los fondos europeos Next Generation, tiene un plazo de ejecución de 105 días. Las empresas interesadas tienen hasta el próximo 24 de julio para presentar sus propuestas.

El proyecto se enmarca dentro de las actuaciones que gestiona la Diputación Provincial de Huelva y el Ayuntamiento de Campofrío, dentro de Plan de sostenibilidad turística de destino Cuenca Minera, lugar por descubrir (PSTD Cuenca Minera). El objetivo es mejorar la visibilidad y transitabilidad del camino preexistente para constituir un atractivo turístico sostenible. Se trata de la preservación del patrimonio natural y del fomento de la identidad del lugar, con la adecuación de la vereda se ponen en valor infraestructuras como la Fuente de la Copa, de posible origen romano; la calleja de la Huella de Santiago o el yacimiento de cantería prehistórica, a lo que se une que esta vía forma parte de los tramos del camino a Santiago.

Es un recorrido de 4,540 kilómetros, desde la Plaza de la Constitución, donde se ubica la Parroquia de San Miguel Arcángel, hasta la margen izquierda del río Odiel. El sendero discurre por la histórica Vereda del Camino a Puerto Moral hasta la bifurcación con el camino Campofrío a Linares de la Sierra en dirección noroeste, una vez atravesado el Arroyo de Valdehombre, desde ese punto hasta el río Odiel. Es una ruta sinuosa en "relativo buen estado de conservación", transitable tanto para peatones como para ciclistas. Parte del recorrido es vía de acceso a las fincas rústicas privadas dedicadas al sector agrario de huerta y dehesa fundamentalmente.

El Puente Viejo es medieval, conecta las poblaciones de Campofrío con Aracena desde finales del siglo XVI, aprovechando una ruta minera conocida desde época romana. Se llevó a cabo una reforma menor del mismo en el siglo XVIII y fue restaurado a principios del siglo XX. Es un viaducto de dos ojos asimétricos, el principal de mayor embocadura y otro menor que actúa de aliviadero, situándose su base a dos metros de altura respecto del primero.

Según se recoge en el proyecto, la fábrica fundacional apunta un puente de un solo ojo o vano, fechable en el primer tercio del siglo XVI. En la ampliación estructural, acometida a mediados del siglo XVI, se reforma el primer ojo y se aumenta la longitud con un segundo ojo aliviadero. Aparte, se realiza una reforma parcial del ojo aliviadero en el siglo XVIII, y ya en el siglo XX se restaura el pretil y se consolidan los arcos y paramentos.

Cuenta la infraestructura de arquitectura hidráulica con basamentos de pilas de sillería granítica, ojos con roscas y bóvedas de ladrillo de diferente tipología, estribos ciegos de mampostería careada, tablero con pavimento transitable de cantos rodados con perfil alomado asimétrico y pretiles de mampostería.