Entre dos orillas

Juan A. Romero

jaromero@paginasdelsur.com

Los remedios de la Huelva lejana y rosa

La Huelva lejana y rosa a la que cantara el crítico flamenco Onofre López se abrocha los cinturones para emprender una maniobra de despegue. Nos permiten soñar con volar los datos de exportación revelados esta semana en la capital por la Agencia Andaluza Extenda, confirmando que la estrategia trazada en internacionalización por el tejido empresarial onubense constituye una auténtica locomotora que cataliza el desarrollo y crecimiento de esta provincia.

Las transacciones de las 854 empresas que operan en el exterior han colocado a Huelva como la primera exportadora de Andalucía en el primer tramo del año, con un 22% del total de los envíos al exterior.

Empero, esta línea ascendente no basta para ocultar perpetuas carencias que aún arrastra este territorio, las cuales lastran su proyección y lanzamiento. La grave privación de infraestructuras imposibilita que la vetusta Onuba compita en igualdad de condiciones con otros nodos, y eso a día de hoy constituye una rémora difícil de superar.

Basta con preguntar a micrófono cerrado a cualquiera de los representantes del pueblo sobre los principales asuntos que frenan el futuro de la economía local, para que todos confirmen la eterna milonga de que la prosperidad y bienestar de esta tierra pasa en gran medida por mejorar la movilidad.

Después de casi dos décadas de promesas incumplidas por parte de un batallón de políticos muy dados a procrastinar, el retraso de la línea de Alta Velocidad Española (AVE) constituye un auténtico nudo gordiano que se ha erigido en muro de contención para frenar el progreso de una tierra que vive sempiternamente ostraciada, ora por la administración autonómica ora por la central.

Mejorar la conexión ferroviaria representa el principal escollo a salvar, porque se necesita acortar los tiempos en el tráfico de mercancias y usuarios y equipararnos a nuestros competidores. De vital importancia resulta también potenciar la capacidad de la red eléctrica para facilitar grandes proyectos en la minería, que a día de hoy mantienen serias dificultades para su desarrollo, lo que les ha llevado a pensar incluso en el autoconsumo. Paradójicamente, Huelva es uno de los mayores productores de energía eólica y sin embargo esta carece de una distribución adecuada.

El tejido productivo onubense gana en robustez y cuenta con compañías que son referentes mundiales en muchos sectores. En contraposición, la provincia adolece de la falta de infraestructuras, condición imprescindible para ser más lideresa. Hora es de reclamar entre todos lo que es nuestro. Mañana puede que sea tarde ya. Despertemos...

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