Desde la Ría

Jose María
Segovia

De cine

20 de noviembre 2025 - 03:07

Como las fichas del dominó, cuando cae una detrás de la otra, las salas de cine van desapareciendo en los años de forma continuada y al parecer inexorablemente fruto de los tiempos, de las nuevas costumbres y del progreso de otros métodos de comunicación, que van borrando aquella imagen romántica de las salas cinematográficas donde aprendimos a conocer tantos aspectos de la vida.

El cierre de un cine es como la hoja de un árbol, que en otoño vuela a un infinito sin regreso. Duele mucho en ese rinconcito del corazón que vivió tantas horas de felicidad, tristezas y aventuras, en la oscuridad de un mundo donde todo lo podíamos alcanzar.

Con el año que se marcha, camino de lo eterno, también se fueron las salas del Aqualon, un edificio de curiosa arquitectura, que al final no tuvo la vida que se esperaba de él.

La ciudad, con un fantástico Festival Iberoamericano de Cine, con más de medio siglo de fama y vida, se desangra en sus salas donde ficción en la pantalla, realidad en el celuloide y vida en el corazón de los espectadores, se apagan como aquellos antiguos carbones de proyección en la cabina.

Otro cine de Huelva que muere y cuyo recuerdo quedará ligado al estreno de muchas y famosas películas, y también hay que decirlo, a muchos romances en el brillo parpadeante de la pantalla iluminada y en el silencio activo de muchas parejas que en la penumbra de la proyección iban forjando sus proyectos de vida en unión sentimental.

Durante toda mi vida visité con alegría esas salas que daban cobijo a una de mis mayores aficiones: el Cine. Y me llené tanto de ellas que durante largas épocas fui crítico en prensa y radio de cada estreno en Cádiz, Sevilla y Huelva, donde mis pobres reflexiones procuraban dar a conocer los valores que las distintas películas ofrecían en nuestras ciudades.

La globalización acaba con todo. Creo que si volviéramos a los cines de capacidad reducida, en el centro de las ciudades, sin molestias de desplazamientos largos, algo se ganaría, marcando la situación de hoy día. O no. A lo peor es que el Séptimo Arte se ve empujado por el Octavo, que no sabemos como será.

stats