Alto y claro
José Antonio Carrizosa
¿Merece la pena?
HACE poco más de cuatro años, el 27 de enero de 2005, me hacía eco en esta columna del libro 'La ciudad de los rascacielos' (Nueva York), de Eduardo Criado Requena: Impresiones de un viaje a los Estados Unidos y recopilación de artículos publicados en distintas revistas de España y América, bajo el seudónimo de 'Eduardo de España'.del Profesor Titular de Literatura Española de la Universidad de Huelva, Eloy Navarro Domínguez, quien a través de tan oportuna e interesante publicación, nos revelaba la personalidad de este onubense casi desconocido como destacada figura de la pintura, la literatura y el periodismo de los primeros años del pasado siglo XX.
Vuelve ahora el profesor Navarro Domínguez con otra personalidad de la poesía andaluza a través de la edición de 'Obra Poética: José María Romero Martínez', que la Espiga Dorada publica en su serie Poesía, una edición auspiciada por la Fundación Caja Rural del Sur. Ello nos permite conocer la ejecutoria poética de José María Romero Martínez, que desarrolló al mismo tiempo que ejercía prestigiosamente su profesión de médico, decantada siempre por una afinidad con la poesía española de su tiempo, el primer cuarto del siglo pasado, que el autor de esta edición sitúa "desde el modernismo rubendariano a la vanguardia ultraísta" y también a la llamada "poesía pura".
En la presentación de este interesante texto, Enrique Barrero González, Presidente del Ateneo de Sevilla, glosa la personalidad de José María Romero Martínez a través de la saga familiar evocando la personalidad ateneista de este "Médico eminente, poeta fácil y brillante, escritor de relatos y novelas cortas, ocasional gobernador interino de la Provincia en aciagos días, no le salvó ni su hombría de bien, ni su extraordinaria excelencia literaria" ya que, trágica y absurdamente, fue fusilado el 20 de septiembre de 1936.
Eloy Navarro Domínguez en su Introducción describe con términos precisos la personalidad del médico y poeta a través de sus rasgos biográficos para desarrollar después un interesante estudio sobre su obra poética, sus afinidades y contactos con los intelectuales de su época, su inclinación por una poesía modernista -compuso uno de los primeros poemas futuristas-, destacando como organizador de la famosa reunión poética de 1927 en el Ateneo y su ferviente dedicación política fiel a un compromiso ideológico con la regeneración que el país necesitaba.
Es meritorio este trabajo del profesor Navarro Domínguez para desvelarnos la poco conocida obra poética de José María Romero Martínez. Según sus afirmaciones en el estudio de la misma: "constituye un interesante exponente de la evolución entre el modernismo y las vanguardias que sigue la poesía sevillana" en los primeros años del siglo XX. Los poemas y prosa poética que integran el libro lo demuestran claramente.
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