Juanma G. Anes
Tú, yo, Caín y Abel
Los afanes
Cervantes en El Quijote para explicar el cinismo utiliza los términos maldad, embuste, bellaquería, ruindad o villanía (de villano). Porque un cínico es un tirano, un falso, un desvergonzado o un impúdico. Los cínicos tuvieron hasta su escuela en la antigua Grecia. En los siglos IV y III a. C. nació la Escuela Cínica de la mano de Antístenes. Diógenes fue tal vez su más famoso representante. El tal Antístenes, discípulo de Sócrates, se planteó de una manera irónica, despreciar la riqueza y cualquier otro atributo material. El hombre, decían, dispone de los elementos para ser feliz y se apartaron de la vida social para convertirse en personas sin necesidades. Mucha ironía, un toque de humor, y un descuido material total.
Ese cinismo ha evolucionado con el paso de los siglos. En la actualidad un cínico es un impresentable. Escribía Cervantes "Bien predica quien bien vive -respondió Sancho-". Y en el fondo, es una definición perfecta del cínico actual. Nuestra sociedad se ha llenado de cínicos, seres irrespetuosos con los demás, alejados de la realidad del ciudadano y sus problemas. Con tal de conseguir sus propósitos mienten, engañan y hasta ese cinismo pasa a convertirse en desvergüenza.
Cinismo es la actitud de Pablo Iglesias cuando habla del salario mínimo o del "¡Sí se puede!" que tanto repite, mientras entra con el coche (taxi o vehículo) en su nuevo chalé. Cinismo es la actitud de Albert Rivera cuando dice que Vox es un partido no constitucional. Va a ser verdad eso de que Ciudadanos es una creación de la izquierda para fragmentar a la derecha. Cinismo es la actitud de los organizadores de la Feria del Libro de Madrid que antes de su inauguración ya habían predicho la visita de más de dos millones de visitantes en la edición de este año. ¿Importan más las visitas que la defensa de la Cultura? Cinismo es la actitud de los organizadores de otras ferias de libros que solo buscan el reconocimiento de los datos (visitas, actos, ventas, palmaditas en la espalda) en vez de la preocupación real por la situación actual de la industria cultural. Cinismo es la actitud de los gobernantes de ahora de la Junta de Andalucía, que no solo no han fulminado a los enchufados y familiares del PSOE de los cargos a dedo, sino que los han mantenido y además han añadido a los suyos.
Escribía también Cervantes: "No es segador que duerme las siestas, que a todas horas siega, y corta así la seca como la verde yerba; y no parece que masca, sino que engulle y traga cuanto se le pone delante".
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