Violencia doméstica
festival de cine iberoamericano Hoy en cartelera
Producción: Puerto Rico, 2011.- Duración: 95 minutos.- Dirección: Sonia Fritz.- Guión: Lymari Nadal, Miguel Machalsky y Sonia Fritz basado en la novela 'El sueño de América' de Esmeralda Santiago.- Fotografía: Willie Berrios.- Música: Daniel Hazmay.- Montaje: Raúl Marchand Sánchez.- Dirección artística: Mailara Santana.- Intérpretes: Lymari Nadal, Yancey Arias, Rachel Ticotin, James Callis, Tony Plana, Edward James Olmos, Yareli Arizmendi, Celinés Toribio, Mónica Steuer.
La violencia doméstica, errónea y absurdamente llamada por muchos "de género", es algo desgraciadamente extendido por todo el mundo. Puerto Rico, donde radica esta película, no escapa a esa lacra que sufren muchas mujeres de la isla. Es una visión del problema desde un punto de vista femenino, ya que mujeres son la directora Sonia Fritz, la coadaptadora Nina Torres Vidal de la novela original de Esmeralda Santiago El sueño de América, así como otra de las guionistas, la propia actriz protagonista, Lymari Nadal, a la que recordarán de American gangster (2007), de Ridley Scott.
Sonia Fritz incide directamente y sin ambages en el problema de los abusos y los maltratos a las esposas por parte de sus maridos o parejas. Éste es el conflicto protagonizado por América, cuyas relaciones con su compañero, apellidado Correa, soldado del ejército norteamericano durante los últimos años en que la Marina de los Estados Unidos mantenía una base naval en Vieques, donde transcurren los hechos, no pueden ser más violentas.
La desaparición de su hija menor de edad con un joven desencadena un drama en el que la realizadora retrata esa misma situación sufrida por muchas mujeres portorriqueñas. América enfrentada a tan dura evidencia logra huir a Nueva York donde tiene familia y empieza trabajar en un hogar al cuidado de los niños de un joven matrimonio. Pero incluso allí no se ve libre de la persecución de su maltratador, que logra averiguar su paradero.
Lo que se plantea como una tragedia familiar adquiere en ocasiones las características de un thriller, una intriga en torno al acoso que el llamado Correa ejerce sobre la protagonista, exponiendo crudamente la realidad dramática que acaba viviendo, alternando escenas de sexo, en ocasiones bastante explícito, con otras donde la brutalidad es bastante ostensible. La dirección, recia en ocasiones y sin concesiones, más allá de las puramente melodramáticas o sentimentales, no pierde ocasión para denunciar la marginación de los inmigrantes en Estados Unidos y las contrariedades de una difícil convivencia lejos de su tierra. En los pasajes en que vivimos más directamente la tragedia de América es cuando la película logra sus mejores efectos sobre el espectador.
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