Muere Alejandro Doria, ganador de un Colón de Plata
Su trabajo fue reconocido en el Festival de Cine Iberoamericano de Huelva
El cineasta argentino Alejandro Doria, que en 2007 ganó el premio Goya a la mejor película de habla hispana con Las manos, murió a los 72 años en una clínica de Buenos Aires a consecuencia de una neumonía crónica, informó este jueves una fuente de la familia.
Doria inició su carrera cinematográfica en 1974 con Proceso a la infamia, y entre sus títulos más reconocidos están Contragolpe (1978), La isla (1979), Los miedos (1980), Los pasajeros del jardín (1982), Darse cuenta (1984) y Esperando la carroza (1985).
Nacido el 1 de noviembre de 1936, Doria estudió ciencias económicas y trabajó como actor y locutor radial, antes de iniciar su trayectoria como director de ciclos televisivos a finales de los años 60, desde donde saltó al cine, aunque mantuvo su trabajo en la pantalla chica. En 1990 presentó su filme Cien veces no debo, y transcurrió más de una década hasta volver a la pantalla cinematográfica con Las manos (2006, sobre la historia del sacerdote italiano sanador Mario Pantaleo) con la que obtuvo el premio de la Academia de cine española. Su último filme recibió además los galardones Oclacc del Festival de Cartagena y el premio Sur y Colón de Plata en el Festival de Cine Iberoamericano de Huelva. En 2004 participó con su episodio Vergüenza del largometraje colectivo 18-J sobre el atentado a la mutual judía AMIA (Asociación Mutual Israelita Argentina), ocurrido en 1994, con un saldo de 85 muertos y 300 heridos.
En una entrevista reciente señaló su decisión de mantenerse alejado de la dirección en TV. "No hago TV porque no estoy de acuerdo con la ideología perversa que se impuso. No estoy de acuerdo ni con las cámaras sorpresa ni con los 'grandes hermanos'", señaló. Durante su carrera, también dirigió y escribió los guiones de múltiples películas como Cien veces no debo y Sofía. En 2006 su película Las manos, interpretada por actores argentinos y españoles, supuso su regreso al cine tras quince años de ausencia y recreó la obra del fallecido sacerdote italiano Mario Pantaleo, famoso por su don de curar o aliviar enfermedades.
No hay comentarios