Antes de que llegara ET, como el gran bombazo que fue en 1982, Spielberg llevó a los cines cinco años antes Encuentros en la tercera fase, que fue, en cualquier caso, el primer gran acercamiento, tan serio como grandioso, al fenómeno ovni. Y funcionó en taquilla. Y la crítica sigue rendida hoy a una de las más grandes (y bonitas, sí) historias de ciencia ficción que hayan pasado nunca por un cine. Da igual las veces que se haya visto, que siempre la emoción se hace cómplice del asombro de los personajes. Aunque ninguna ocasión puede ser igual a la oportunidad de verla en pantalla grande, con todo el esplendor de sus espectaculares efectos visuales y la fotografía de Vilmos Zsigmond.

Encuentros en la tercera fase se podrá ver de nuevo en el cine en Huelva, entre el 18 y el 21 de febrero, en Cines Aqualon 4K, restaurada, en su mejor versión de imagen y sonido, además, como parte del ciclo Revive los mejores clásicos, que han programado cinco clásicos recientes las salas del centro de ocio del Puerto para este mes de febrero.

Las películas de este ciclo podrán verse de lunes a jueves en dos pases diarios, que dan la oportunidad de ver grandes películas en versión original y doblada al castellano.

El primero de los títulos del ciclo, Pulp Fiction (1994), de Quentin Tarantino, empezó a proyectarse ayer y seguirá en cartelera hasta este jueves. Continuarán la programación Terminator 2: El juicio final (1991), de James Cameron, entre el lunes 2 y el jueves 4 de febrero; El Padrino (1972), de Francis Ford Coppola, entre el 11 y el 14 de febrero; Encuentros en la tercera fase (1977), de Steven Spielberg, del 18 al 21 de febrero; y El expreso de medianoche (1978), de Alan Parker, del 25 al 28 de febrero.

Los horarios y precios estarán indicados cada día en la web y las redes sociales de Cines Aqualon 4K, que este jueves lanza un precio único y especial para todas las películas de la cartelera (excepto las no adheridas) a 2,90 euros.

Pocas experiencias puede haber similares a estar en la butaca del cine ante esa escena inicial con Bonasera en la penumbra del despacho de Vito Corleone, ajenos al bullicio de la boda de Connie. Es el lujo de ver, probablemente, la magna obra de la historia del cine junto a su secuela, de 1974. Y ahora se puede experimentar en Aqualon.