Una red de 10 sonómetros controla ya el exceso de ruido en la ciudad

Varios han sido los pasos ejecutivos que ha dado el Ayuntamiento desde que en septiembre se celebrara en Montija un congreso nacional sobre el control de la contaminación acústica. De un lado, se ha instalado ya en calles estratégicas de la ciudad la primera decena de sonómetros, equipos monotorizados que servirán para aplicar medidas correctoras y vigilar las emisiones en tiempo real para elaborar el mapa dinámico de ruidos. Con esta cartografía- que se está empezando a calibrar con los nuevos dispositivos- Huelva se adelantará a los requerimientos del Ministerio de Medio Ambiente para el horizonte de 2010.

Según informaron desde el Consistorio, esta primera tanda de sonómetros se ha distribuido entre la Plaza de La Merced (frente a la Universidad); la Avenida de la Unión Europea (frente a la barriada de La Navidad); Avenida Diego Morón (junto al centro de salud); la prolongación de la Avenida de Andalucía (en la rotonda de la fuente con música); la Plaza de los Litri (frente a Carrefour Express); Plaza Quintero Báez; Doctor Rubio (frente a la estación de autobuses); el campus universitario del Carmen; Avenida de Italia (esquina con la estación de trenes) y las traseras del nuevo mercado (esquina de Villa de Madrid con la calle Cádiz).

De otro lado, la concejalía de Juan Carlos Adame (Economía, Empleo y Desarrollo Sostenible) ha trabajado también en la modificación parcial de la Ordenanza para la Protección contra la Contaminación Acústica [entrando en vigor este mismo mes de diciembre]; a la espera de que se haga una revisión total del texto cuando la Junta de Andalucía apruebe el nuevo reglamento sobre esta materia y se establezca una ordenanza tipo para todos los ayuntamientos.

De momento, según explicó Adame, se ha estrenado ya un sistema pionero de mediciones, una red de sonómetros (que será oficialmente inaugurada por el alcalde en los próximos días), y que se ampliará de tal forma que los 50 que han sido encargados estén operativos para inicios del año entrante. Este suministro no sólo tiene coste cero para la Administración local, ya que los dispositivos tienen un soporte publicitario, sino que el Consistorio percibe el 20% de los ingresos que aporten los anuncios. El proyecto lo ha puesto en marcha la empresa Eygema, que en esta andadura se ha unido tecnológicamente con otras dos entidades, Proceso Digital de Audio e Impursa para la elaboración del citado mapa de ruidos. El contrato de este servicio incluye también la formación integral de técnicos e inspectores.

Con este medio centenar de sonómetros con protección de interperie, la capital onubense tendrá la red de control acústico más amplia de España. "Madrid, por ejemplo, sólo cuenta con 36 sonómetros", apuntó el concejal.

Hasta este otoño, Huelva sólo contaba con ocho medidores, con una tecnología que sólo permitía visualizar fotografías estáticas de los niveles de emisión de ruido en la ciudad. Con la tecnología contratada se obtendrá una cartografía dinámica en tiempo real y durante las 24 horas.

Las fuentes ruidosas que se analizan en el mapa de ruidos son los ejes viarios de la ciudad, actividades de ocio, aglomeración de personas, actividades y zonas industriales, infraestructuras portuarias y ferroviarias y Zonas Acústicamente Saturada.

Además, se presta especial atención al entorno de hospitales y centros sanitarios, las zonas educativas y culturales y las zonas residenciales y deportivas. Se pone a disposición de los servicios técnicos municipales una unidad móvil de medida con capacidad de transmisión de datos vía telemática y con posicionamiento GPS.

La previsión del Ayuntamiento es contar el año próximo con este mapa dinámico de ruidos, exigido por la Administración central a todos los municipios que superen un umbral de 100.000 habitantes. El objetivo marcado a nivel nacional es computar la población residente en zonas de alto impacto acústico para fijar medidas correctoras.

La empresa Eygema elaborará un marco web para que los ciudadanos puedan acceder a la información recabada por estos medidores, prácticamente en tiempo real, con un desfase de entre una y dos horas).

El sistema que hasta la fecha había funcionado en la capital permitió diseñar el mapa de ruidos del año 2000, la referencia vigente para la ordenanza. Este localizador sitúa la zona de mayor saturación en el triángulo Pablo Rada-San Pedro-La Merced, la Zona Acústicamente Saturada (ZAS) que implica la restricción de licencias de actividades que provoquen ruido y una mayor frecuencia de las inspecciones.

El triángulo definido se extrapola a un entorno de 30 calles de la ciudad y otras tantas con calificación de presaturadas.

Entre las primeras se encuentran Ramón menéndez Pidal desde la Plaza de La Merced a la calle Aragón; Paseo de Buenos Aires desde el Paseo de la Independencia a la calle Aragón Vázquez Limón; Ginés Martín; Ciudad de Aracena; Amado de Lázaro; Jacobo del Barco; Rui Velez; La Palma; La Piterilla; Plaza Dos de Mayo; calle Velarde; Daóiz; Licenciado Juan de Mora; Alonso Barba; Plaza de San Pedro; calle Jesús de la Pasión; La Fuente; Plaza de La Soledad; calle Almirante Garrocho; Pablo Rada; Plaza Quintero Báez; Vía Paisajista hasta la calle Argantonio; calle Mackay y Macdonald hasta calle R. Zamora; Avenida Martín Alonso Pinzón desde la calle San Salvador hasta la Alameda Sundheim; calle Padre Marchena y Plaza del Punto.

Como zonas presaturadas, en el mapa vigente constan: el paseo Santa Fe, Isaac Peral; la manzana entre Fray Junípero Serra; San Sebastián; Fray Juan Pérez y Avenida del Cabezo de La Joya; Paseo Buenos Aires desde la calle Aragón hasta la rotonda; Doctor Plácido Bañuelos; calle San José desde la Palma; calle San Andrés; Fray Junípero Serra; Jesús de la Pasión y Avenida de la Joya; Fray Juan Pérez, calle Duque de Ahumada; Plaza de los Litri; calle San Salvador hasta Padre Marchena; calle Sor Ángela de la Cruz hasta Berdigón y la acera izquierda de esta última.

Aunque las estadísticas sitúan a Huelva como la segunda capital andaluza menos ruidosa, estamos lejos aún de cumplir las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) que, por ejemplo, para el tramo nocturno pone un límite de 45 decibelios, 11 menos que los mínimos que se registran en Huelva.