La razón por la que la DANA no ha provocado inundaciones en Huelva ni ha sido tan "agresiva" como en otras ciudades según un experto de la UHU
¿Podría ocurrir en Huelva un fenómeno como el que ha sucedido en el Levante? La respuesta, según Juan Antonio Morales, doctor en Geología y catedrático de la Universidad de Huelva, es sí, aunque la probabilidad sería menor y para que eso se produjera tendría que afectar al Atlántico
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El impacto de la DANA Orestes sobre la provincia de Huelva no ha sido, por suerte, tan "agresivo" como en la parte del Levante español. Pese a que las lluvias y tormentas dejarán, previsiblemente, hasta 30 litros por metro cuadrado en una hora este 1 de noviembre (con avisos amarillo y naranja activos por parte de la Aemet), Huelva se ha librado de la peor parte: las grandes inundaciones que azotan el área mediterránea.
Juan Antonio Morales, doctor en Geología y catedrático de la Universidad de Huelva, ha explicado a Huelva Informacion que si una catástrofe como la que ha pasado en Valencia, una DANA, se produjera en el Atlántico y afectara a Huelva, "nosotros no tendríamos ese nivel de inundación", puesto que no tenemos la misma orografía que en el Levante español. En Huelva "no tenemos cordilleras tan cercanas a la Costa. En este caso, la Sierra de Aracena está a 100 km de la Costa, con lo cual, la respuesta del río no es tan inmediata, el agua que cayera en la Sierra tardaría un día en llegar a Huelva, porque la pendiente no es tan elevada", ha indicado.
Lo que ha pasado en el Levante español, aclara, es el fenómeno conocido como DANA. Para que se produzca una DANA lo que tiene que pasar es "que el agua del mar se caliente y transmita parte de su calor y parte de su humedad a las capas bajas de la atmósfera". Esa mezcla de aire húmedo y cálido ascienden. "Tiene que coincidir que en las capas altas de la atmósfera haya un embolsamiento de aire frío. Al ponerse en contacto bruscamente el aire caliente que va ascendiendo del mar cargado de humedad con ese aire frío, se produce un enfriamiento súbito y toda la humedad que tiene el aire del mar que va subiendo, la suelta en forma de lluvia de manera inmediata", indica.
En este caso, se ha producido en aguas del Mediterráneo, a causa del calentamiento global (que hace que esté más caliente de lo normal) y no en el Atlántico, zona en la que de haberse producido sí habría afectado a Huelva, Cádiz y el Algarve portugués. A pesar de ello, en este caso, Cádiz sí se ha visto afectada porque una parte de la masa de aire se ha desplazado a la zona de Andalucía oriental y ha entrado hacia la provincia de Cádiz, "pero no ha alcanzado a Huelva".
Sin embargo, Morales explica que el hecho de que haya una DANA no tiene por qué implicar "que se forme una catástrofe como la que hemos visto en el Levante español". Algo que se debe, primero, a que las lluvias torrenciales han sido muy intensas, pero también a que el urbanismo de la zona mediterránea española "está hecho sin una planificación adecuada" y se han visto invadidos los valles fluviales. "Los valles fluviales en el Mediterráneo son efímeros, es decir, que la mayor parte del tiempo los ríos van secos. Da también la circunstancia de que el Levante español es montañoso, es decir, que las montañas están cerca de la Costa y los ríos son de alta pendiente. Con lo cual, la respuesta del sistema fluvial ante la lluvia es inmediata".
¿Podría ocurrir en Huelva un fenómeno como el que ha sucedido en el Levante?
La respuesta, según el experto es sí, aunque la probabilidad sería menor y para que eso se produjera tendría que afectar al Atlántico. "Las DANAS que suelen afectar al Golfo de Cádiz siempre están relacionadas con el calentamiento de las aguas atlánticas. Lo que ocurre es que el agua atlántica es más fría y es más difícil que se caliente", aclara. Con lo cual las DANAS en la zona del suroeste no son "tan agresivas" como las del Mediterráneo. Sin embargo, a pesar de ello "podrían llegar a alcanzar el mismo nivel en determinadas circunstancias". Para que este ocurriera, tendrían que conjugarse distintos factores.
El experto aclara que las inundaciones que estamos viendo en el Levante español o las que se pueden ver en las zonas de Málaga, Almería, son inundaciones fluviales. Es decir, la lluvia cae en el terreno, el terreno no absorbe el agua porque es rocoso y tiene una respuesta del inundación. "Como las ciudades están construidas en los cauces, la lluvia arrasa con ellas". En Huelva se produce un fenómeno un poco distinto, "porque en Huelva hay marea". Los ríos de Huelva y de Cádiz, de la zona Atlántica, llegan a una Costa donde hay mareas. "Entonces se produce una situación especial, se les llama inundaciones fluviomarinas". Esas inundaciones fluviomarinas requieren además la confluencia con la marea. Si la marea está entrando a los estuarios y al estuario está llegando a la vez el agua que está cayendo del cielo en ese momento, junto a la que llega del día anterior (tendría que llover durante dos días seguidos) desde la Sierra y, encima, hay una marea "grande o viva" que está entrando, se produciría una acumulación de agua que haría subir los niveles. Eso sí daría lugar a inundaciones".
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