El hospital materno-infantil en "un edificio independiente y anexo al Juan Ramón Jiménez" sería el único que gozaría del visto bueno de sindicatos sanitarios de la provincia onubense, según han confirmado esta semana a este diario UGT, CCOO, Satse, CSIF y Sindicato Médico.

Tales centrales sindicales, en declaraciones a esta redacción, ponen de manifiesto que esta opción es la que "garantizará intimidad y una atención independiente a mujeres y niños", al tiempo que "lo conectaría con el propio Juan Ramón Jiménez para compartir recursos".

El área de hospitalización de Obstetricia y Ginecología tendría un total, como mínimo, de 65 habitaciones individuales, de las que 50 serían de hospitalización general para obstetricia y puerperio y 15 para patologías ginecológicas propiamente dichas. Alrededor de 25 metros cuadrados es lo que se estipula para una habitación individual de este tipo. A ello se sumaría una sala de control de enfermería, dos salas específicas (hipoacusia y otra para madres y recién nacidos), más las denominadas salas accesorias (almacenaje, despachos, logística etc.).

El bloque obstétrico contaría con una zona de monitorización y pruebas de bienestar fetal de pacientes ingresadas preparto (con seis puestos en boxes independientes, control de enfermería y sala de espera de familiares), además de una decena de habitaciones integrada en una unidad de trabajo de parto, parto y recuperación, lo que supondría que todo el proceso para dar a luz se llevaría a cabo en un mismo espacio y no en tres diferentes. De este modo, no hay salas de dilatación, área de paritorio y sala de recuperación, sino que todo se englobaría dentro de la misma zona, evitando el desplazamiento de la madre y la humanización del parto. Igualmente, el bloque incorporaría un quirófano para urgencias obstétricas próximo a las habitaciones y un área de reanimación. 

Tales habitaciones estarían diseñadas como dormitorios con mobiliario acogedor y decoración adecuada, además de un asilamiento acústico para mayor intimidad. 

Por otro lado, figura en el mencionado proyecto el bloque quirúrgico, compuesto de zona de acceso y recepción, sala logística, sala de preparación quirúrgica, cinco quirófanos (tres de ellos para la actividad programada y dos para urgencias, con una superficie de unos 40 metros cuadrados, tres metros de altura y seis metros de diámetro), además de una zona postquirúrgica con diez puestos de reanimación, de los que cuatro estarían adaptados para recién nacidos.

En el área de ginecología y obstetricia también se impulsaría un hospital de día quirúrgico y una unidad de cirugía mayor ambulatoria. Se contempla, en este sentido, una zona de readaptación al medio para toco-ginecología con seis puestos.

Por último, dicho proyecto recoge las Consultas Externas con 26 consultas divididas en 10 para ginecología, planificación familiar, patología del suelo pélvico, discapacitados, revisiones de embarazo y enfermería; nueve para medicina materno fetal; tres consultas para reproducción humana asistida; una consulta para histeroscopia; y dos para oncología ginecológica. 

La zona de reproducción humana asistida sería "muy amplia" y requeriría de mucha logística, dado que contaría con espacios diferencias como quirófano de punciones, sala prequirúrgica, laboratorio, sala de transferencias embrionarias, sala de congelación de embriones, semen y ovocitos, sala de reuniones y área de recepción.