Balance de Criminalidad

Los onubenses sufren seis robos cada día

  • En los primeros nueve meses del año se han contabilizado 14.480 infracciones penales, un 1,4% más

Un vehículo que sufrió un robo el pasado verano en Isla Cristina.

Un vehículo que sufrió un robo el pasado verano en Isla Cristina. / H. Información (Isla Cristina)

Los delitos han crecido en la provincia onubense un 1,4% en los primeros nueve meses del año, alcanzando las 14.480 infracciones penales (203 más que en 2018). El leve repunte constatado en el último Balance de Criminalidad del Ministerio del Interior, actualizado hasta el mes de septiembre, viene a confirmar la tendencia al alza del primer semestre.

Salvo los delitos patrimoniales y el tráfico de drogas, todos han aumentado en nuestro territorio, una subida que protagonizan los homicidios y asesinatos, que han experimentado un incremento del 400%, o las agresiones sexuales con penetración, que son ahora un 240% más.

Los robos y los hurtos menguan, sí, pero siguen estando entre los delitos que más preocupan a la ciudadanía por su elevado volumen y por la intromisión que suponen en la intimidad de las personas, lo que hace a la Guardia Civil y a la Policía Nacional emplearse a fondo, en colaboración con la ciudadanía y las policías locales, para combatirlos con todos los recursos posibles.

Huelva cerró septiembre con 1.575 sustracciones en total, una cifra que se obtiene de sumar los robos con violencia e intimidación (221), los robos con fuerza en domicilios, establecimientos y otras instalaciones (1.185) y los robos de vehículos (169). Y esto da como resultado una media de casi seis robos diarios, 5,8 en total para ser precisos.

En la provincia se han dado 134 delitos sexuales, de los que 17 fueron agresiones con penetración

No se incluyen en este conteo los hurtos, que siguen siendo la modalidad delictiva más extendida, con 3.181 casos en los primeros nueve meses del año. O lo que es lo mismo, una media de 11,6 al día. Estos han descendido un 1,7% respecto al año pasado.

Entre los robos, los más destacados por su elevado número son los robos con fuerza, aquellos cometidos en domicilios, comercios, fábricas u otras instalaciones en los que los ladrones provocan algún destrozo para entrar pero no atacan ni amenazan a ninguna persona. Se suelen cometer de noche o los fines de semana, con las viviendas vacías o los comercios cerrados al público. De este tipo hubo 1.185 delitos en Huelva de enero a septiembre, el 8,9% menos que en 2018.

Los perpetrados en viviendas fueron 930, una media de 3,4 cada día. Esta cifra también supone un decrecimiento importante, del 12,2% en 2019 en relación al ejercicio precedente. Generalmente este tipo de delitos suelen ser cometidos por bandas itinerantes, que violentan los pisos hasta que creen que pueden ser detenidas y se desplazan a otras ciudades. Pero también hay cacos autóctonos, a los que los agentes encargados de investigar este tipo de delitos pueden reconocer, sencillamente, observando su modus operandi.

De esos 930 robos en domicilios, 157 tuvieron lugar en la capital, donde sí experimentaron un aumento del 18,9%, según la estadística de Interior. Para hacerles frente, la Policía Nacional, de la mano de su comisario, Adolfo Castaño, ha reestructurado la Unidad de Patrimonio, potenciándola en su manera de trabajar y en el número de componentes, lo que hará que los resultados se dejen ver a medio o largo plazo.

La Guardia Civil en la urbanización Lomas de Esuri, en Ayamonte, donde se produjo el crimen machista de Lisbet Lastre en junio. La Guardia Civil en la urbanización Lomas de Esuri, en Ayamonte, donde se produjo el crimen machista de Lisbet Lastre en junio.

La Guardia Civil en la urbanización Lomas de Esuri, en Ayamonte, donde se produjo el crimen machista de Lisbet Lastre en junio. / Jordi Landero (Ayamonte)

Como indicó el propio Castaño a este diario en una entrevista reciente, la coordinación con la Policía Local es fundamental para combatir los robos en las viviendas, y en épocas clave como la romería del Rocío se emplearon a fondo para proteger a los ciudadanos en estas lides. Pero la colaboración ciudadana también es vital. El comisario recomienda que "no le abran la puerta al primero que llame al portero, que si oyen un ruido extraño, que nos llamen, que si ven gente sospechosa que no son del barrio, que nos llamen también; así nos ayudan mucho".

El Balance de Criminalidad no especifica cuántos de los robos con fuerza se registraron en comercios, pero sin duda sobrepasan los 200. En esta modalidad delictiva también se encuadran los alunizajes, si bien estos no son muy frecuentes en la provincia.

En el acumulado del año quedan 169 coches robados en Huelva, 59 de ellos solo en los meses estivales, nueve más que en el tercer trimestre de 2018. En la capital la sustracción de vehículos alcanzó los 40, dos más.

Muchos de estos coches son usados en los robos, pero también en el tráfico de drogas, que protagoniza 111 delitos, un 27,9% menos que un año atrás. De julio a septiembre hubo 42 infracciones penales por narcotráfico registradas, 29 en territorio de la Policía Nacional y 82 en demarcación de la Guardia Civil.

El capítulo de los robos se cierra con 221 casos perpetrados con violencia e intimidación. Es el único apartado de crece en el global de los delitos patrimoniales, un 11,1%. Aquí, más allá del trauma que suponen para las auténticas víctimas, también se dan denuncias falsas sobre supuestos robos de teléfonos móviles para estafar al seguro.

Los asuntos que sí suben y mucho (+400%) son los homicidios dolosos y asesinatos consumados. El único que se había producido en 2018 a estas alturas era el de Cristina Marin, asesinada en Lepe por su expareja sentimental.

Homicidios y asesinatos han pasado de ser uno en 2018 a los cinco de 2019, un 400% más

Ahora el Ministerio del Interior contabiliza cinco: el doble crimen de Cartaya, el crimen del salón de juegos de la avenida de Galaroza, el asesinato machista de Lisbet Lastre en Costa Esuri y el asesinato de un hombre que tuvo lugar el 19 de julio en un asentamiento de Lepe. No consta, quizá porque se califica como suicidio, la muerte violenta del marido de Lisbet en la vivienda donde ambos aparecieron muertos en el mes de junio.

Los homicidios y asesinatos en grado de tentativa han sido nueve en los tres primeros cuartos del año. Aquí se cuentan, entre otros, el apuñalamiento de una mujer en Bollullos en marzo (su pareja se suicidó) o el ataque al jefe de la Policía Local de Punta Umbría.

Los delitos sexuales siguen creciendo debido al efecto de la Manada, que ha llevado a muchas mujeres a poner en conocimiento de las Fuerzas de Seguridad abusos o agresiones que no siempre se denunciaban antes. Se han registrado entre enero y septiembre 134 delitos contra la libertad sexual, un 16,5% más. De ellos, 17 han sido violaciones, seis de las cuales se denunciaron en la capital. Teniendo en cuenta que solo un año atrás fueron cinco en la provincia, el incremento es del 240%.

También subieron las peleas, con 174 casos por 142 del año anterior, un 22,5% más. En la capital acontecieron 36 delitos de lesiones y riña tumultuaria de enero a septiembre, un aumento del 24,1%. Hay otras 9.289 infracciones penales cuya naturaleza no se determina en la estadística.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios