Investigan una presunta agresión sexual a una menor durante las fiestas de La Hispanidad en Huelva
El padre de la niña, de 10 años, denuncia a un conocido de la familia por supuestos tocamientos en una barra de bar de la barriada
El juez impone al denunciado una orden de alejamiento de 200 metros y la prohibición de comunicarse con la menor tras observar las imágenes grabadas por las cámaras del establecimiento
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Investigan un supuesto delito de agresión sexual a una menor en las fiestas de La Hispanidad de Huelva capital. El padre de una niña de 10 años ha denunciado ante la Policía Nacional a otro hombre, conocido de la familia, por supuestos tocamientos en partes íntimas de su cuerpo mientras la menor se encontraba en una barra de bar en las fiestas de la barriada el pasado 10 de octubre. Como medida cautelar, el Juzgado de Instrucción Número 2 de Huelva ha acordado, en funciones de guardia, la prohibición al denunciado de acercarse a menos de 200 metros a la menor, a su domicilio o a cualquier lugar en el que se encuentre, así como a comunicarse con ella por cualquier otro medio o procedimiento. Hechos que constan, tanto en la denuncia policial como en el auto judicial, a los que ha tenido acceso este periódico.
Del atestado policial se extrae que el pasado 10 de octubre, durante las fiestas en La Hispanidad, el padre de la menor llegó durante la tarde a la asociación de vecinos del barrio, "donde se encuentra con un conocido de toda la vida, a quien saluda, y quien le pregunta a la menor si quería tomarse un refresco", petición que esta rechaza. Seguidamente, padre e hija se marcharon al domicilio, pero la menor volvería a bajar poco después a las pistas de la barriada "porque había fiesta en el barrio e iban a comenzar los bailes".
El declarante asegura en la denuncia que bajó a las pistas, "observando y grabando a su hija en los bailes" y que, al finalizar estos, la menor le cuenta que, cuando bajó a las pistas, paró en la asociación de vecinos a pedir un vaso de agua, "encontrándose otra vez al hombre -el denunciado-, que comenzó a insistirle para que se tomara un refresco", rechazando "en repetidas veces" la propuesta. Consta en la denuncia que "él continuó tras ella hasta llegar a la barra, donde pide un vaso de agua, acercándose por la espalda; y comenzó a tocarla con sus manos por los costados, a la altura de los pechos y bajó sus manos tocándole el culo e intentando tocarle las partes íntimas". Prosigue el atestado señalando que "se pegó a ella, comenzó a rozarse" y una de las trabajadoras de la barra del bar "le llamó la atención", momento en el que la menor "se apartó y se marchó".
Tras ser conocedor de los hechos, tal y como se extrae de la denuncia y de acuerdo a las declaraciones del padre a este periódico, "me acerqué para preguntarle a la trabajadora le llamó la atención que había pasado y dijo que había visto como se rozaba por la espalda". Tras ello, buscó por las pistas de La Hispanidad a aquel hombre y le dijo que "no quería que se acercara a la niña nunca más bajo ningún concepto". A lo que el hombre respondió que era "mentira", personándose justo después en el lugar un indicativo policial, que identificó a las personas y se entrevistó con ellas.
El auto del juez, del 12 de octubre, acuerda como medida cautelar la prohibición de aproximarse a menos de 200 metros a la menor, a su domicilio o a cualquier otro lugar en el que se encuentra, además de prohibirle la comunicación con ellas. Existen indicios, según el auto, "de que el investigado se aproximó a la menor cuando se encontraba en la barra de un bar de las fiestas de La Hispanidad, se acercó por detrás a ella y comenzó a tocarla con sus manos por los costados a la altura de los pechos y bajó sus manos tocándole el culo, pegándose a ella con ánimo evidentemente lúdico". Así consta, dice el auto, "en las actuaciones vistas en el vídeo que grabaron las cámaras del establecimiento, donde se observa con claridad la conducta del denunciado, así como la intervención de dos personas para que cesara en su actitud".
Del mismo modo, el auto recoge que el investigado negó los hechos, "afirmando que se trataba de una broma y de un juego con la menor", si bien, "pese a lo manifestado por el investigado", el juez considera que hay "un evidente ánimo lúdico en la acción con la menor" y, como medida cautelar, acordó las mencionadas prohibiciones de acercamiento y comunicación.
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